El procedimiento de supresión
de apellido paterno se encuentra regido por una ley, la 18.248.
Buenos Aires (Télam) > El juicio civil
iniciado por la hija de un ex comisario y torturador de la dictadura
militar para cambiar el apellido paterno por el de su madre, espera
sentencia judicial para los próximos días en los Tribunales
de Lomas de Zamora.
La causa judicial por «cambio de nombre» iniciada por
Ana Rita Pretti Vagliati, hija del ex comisario Valentín Milton
Pretti fue iniciada en los Tribunales de Lomas de Zamora en marzo
de 2005.
Germán Córdoba, abogado de Vagliati, manifestó
en diálogo con Télam que la demanda se encuentra «en
despacho», luego del pedido de sentencia efectuado por el letrado
en los Tribunales de Lomas de Zamora.
El procedimiento judicial de supresión de apellido paterno,
se encuentra regido por la ley 18.248 que regula lo atinente al nombre
de las personas.
En su artículo 15, la ley establece que «después
de ser asentados en la partida de nacimiento el nombre y apellido,
no podrán ser cambiados ni modificados sino por resolución
judicial, cuando mediaren justos motivos.
El pedido de cambio de nombre por ser hija de un torturador, no tiene
antecedentes en la justicia argentina, según explicó
Córdoba, quien fundamentó la demanda por considerar
a Vagliati «afectada subjetiva y objetivamente por su historia
familiar y social».
Luego de la presentación de las pruebas, que incluyen documentación
sobre las actividades del represor, más testimonios que acompañaron
a la causa, se espera la resolución final por parte de los
jueces José Imperiale, Liliana Vicente y María Almeida.
El caso de Ana Rita Pretti Vagliati, hija del ex comisario Valentí
Milton Pretti, denunciado por torturas, secuestros y extorsión
en distintos centros clandestinos de detención tomó
estado público cuando la mujer, de 34 años, inició
el año pasado una causa civil por «cambio de nombre».
«Quiero terminar con ese linaje de muertes porque no acepto
ser la heredera de todo ese horror», había dicho en declaraciones
periodísticas cuando acompañada por su terapeuta y su
abogado decidió recurrir a la justicia en marzo de 2005.
Los archivos de la Conadep revelan que Milton Pretti, quien falleció
en abril de 2005, fue director del centro clandestino COT-I, en Martínez
y había participado en otros centros como el Pozo de Banfield
y el de Quilmes, en el mismo grupo de los represores Ramón
Camps y Miguel Etchecolatz. ista Rafael Perrota. |