Buenos Aires, (Télam) >
Los fiscales del juicio por el atentado a la AMIA recurrirán
a la Cámara de Casación, máximo tribunal penal
del país, en un intento por revertir la decisión del
Tribunal oral, que ayer separó del proceso a dos de ellos,
Eamon Mullen y José Barbaccia.
A esta actitud desafiante de la fiscalía hacia los jueces Gerardo
Larrambebere, Miguel Pons y Guillero Gordo se sumó ayer la
ausencia en la sala de audiencias de los abogados de la AMIA, DAIA
y Familiares de Víctimas del atentado.
«En virtud de que el Ministerio Público Fiscal recurrirá
a Casación contra la decisión de apartar a dos de sus
fiscales y para no afectar la audiencia, no habremos de solicitar
la suspensión del juicio sin que esta actitud signifique apoyar
lo resuelto por el Tribunal», aclaró Miguel Angel Romero
a los jueces.
Recurso
Los fiscales en pleno -Romero, Alberto Nisman, Mullen y Barbaccia-
firmarán el recurso de Casación que será presentado
en los próximos diez días, aunque este tribunal de
apelaciones no tiene plazos para resolver.
De hecho, el recurso recaerá en la sala I de Casación,
la misma que desde hace meses tiene pendiente una resolución
sobre la validez de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.
Si su decisión no satisface a los fiscales o al Tribunal,
el tema podrá llegar ante la Corte Suprema de Justicia, aunque
esto no derivaría en la suspensión del juicio oral
contra cinco acusados de «partícipes necesarios»
del ataque, que ya está en su etapa final.
Mientras los fiscales Romero y Nisman anunciaban su decisión
a los jueces, los querellantes de la DAIA, AMIA y Familiares estaban
lejos de los Tribunales de Retiro, en la sede de Pasteur 633, analizando
los pasos a seguir.
«Por lo pronto lo único seguro es que hasta que no
se decida qué hacer, los abogados no iremos al juicio»,
explicó uno de los letrados. |