LAS GRUTAS.- A esta
altura de enero, ya nadie duda sobre el animado movimiento turístico
que registra la temporada, pero se va definiendo: el turismo habitual
viene experimentando cambios y se va convirtiendo en un consumidor
selectivo, «elitista» y con mejor poder adquisitivo.
La demanda exigente de un turista hoy impedido de viajar al exterior
(por la situación económica) y siempre acostumbrado
a recibir buenos servicios en lugares exóticos, ha obligado
a los prestadores privados de Las Grutas a reconvertir la oferta
para garantizar una mejor calidad de alojamiento.
Así lo marcan las estadísticas, donde se puede apreciar
que durante diciembre (20.832 turistas) hubo una fuerte tendencia
en la preferencia de la gente por los complejos (18 por ciento),
hoteles, apart (12 por ciento) las inmobiliarias (11 por ciento),
por sobre el alquiler de las casas particulares (8 por ciento) y
los cámping (2 por ciento).
La conclusión a la que arriban algunos privados es que este
año Brasil, Uruguay y el Caribe, ya no son una opción
de veraneo para el turista argentino.
«Apareció un mercado gigantesco y nuevo, procedente
de Buenos Aires», sintetizó Gerardo Gibert, gerente
de Marina Cero.
El objetivo de los prestadores siempre fue convertir a Las Grutas
en un producto turístico selectivo y ubicarlo como un centro
de vacaciones destinado a cierto perfil (de alta solvencia económica)
y con servicios acordes.
Un ejemplo de cómo se jerarquizaron estos rubros y se amplió
su oferta de servicios lo demuestra el caso de Marina Cero, un complejo
de alquiler de departamentos que brinda a sus huéspedes -además
de un confortable alojamiento-, prácticas de deportes, clases
de natación, gimnasia tradicional, cancha de fútbol
y todo tipo de actividades recreativas.
«La gente ha decidido venir a lugares como éste, básicamente,
por una cuestión de que le ofrecemos comodidades similares
a otros lugares de gran demanda turística», explicó
Gibert.
Para el gerente de Marina Cero, a los turistas les resulta más
fácil y «más atractivo reservar un lugar como
este complejo antes que alquilar otros sitios».
Los prestadores consultados dicen que este año no hay discusiones
por el precio, sino que los turistas prefieren asegurarse mejor
los servicios y un buen alojamiento, «y en eso no se han puesto
reparos en cuanto a las tarifas», sostuvo Gibert.
Con él coincidió Carlos Landivar, antiguo empresario
de bienes raíces, al señalar que la gente «está
pagando los precios sin reparos a pesar que nosotros aumentamos
entre un 20 por ciento y un 30 por ciento en relación al
año pasado».
El turista «busca buenos servicios porque para esta temporada
se impone la calidad; es decir la gente busca casas bien equipadas,
lo mismo en departamentos, preferentemente que estén frente
al mar».
Sobre el tipo de servicios que se solicitan antes de programar las
vacaciones, el turista hace -básicamente el de Buenos Aires-,
hincapié en la seguridad y el estacionamiento.
Para Inés Garza, gerenta del complejo Mirador Azul, la particularidad
de este año es que han aparecido clientes nuevos y eventualmente
han desplazado los clientes históricos. «Por ejemplo,
a todos los clientes habituales que suelen venir del sur de La Pampa
y de Córdoba este año se le anticiparon los que antiguamente
eran clientes de Viña del Mar y de las playas de Las Serenas».
Y en la misma sintonía, Juan García Belber, presidente
de Casablanca Las Grutas dijo haber notado cierta tendencia de ocupación
en los complejos, de todas maneras, este año «la demanda
es tan amplia y profunda que tenemos todos los perfiles de consulta
de servicios».
Calidad y mejores controles
LAS GRUTAS.- Para conformar y crear confianza
en el turista, los propietarios y gerentes se preocupan por brindar
una atención personalizada de los servicios.
Landivar sugiere a los interesados en visitar Las Grutas (sobre
todo a los que viven a 500 kilómetros), llegar antes «para
ver lo que alquila, a los efectos de no llevarse sorpresas, y además
nosotros recomendamos de que elijan bien».
Una forma de ir regulando la calidad, como es obvio, pasa por poner
en vigencia controles más exigentes. Por ejemplo, desde el
2001 los propietarios de casas, departamentos y complejos de alquiler
que no se encuentran habilitados como hoteles, residenciales y hosterías,
y que no tributan, deben pagar una tasa en concepto de servicios
turísticos indirectos. La decisión fue tomada en noviembre
del 2001 por el Concejo Deliberante.
Precios para todos los gustos
LAS GRUTAS.- La atención personalizada,
la garantía de contar con servicios de mayor jerarquía
y la posibilidad de ofrecer espacios cómodos con vista al
mar, hacen de los complejos y departamentos un objeto de gran demanda
durante esta temporada.
El balneario tiene una óptima calidad de oferta en cuanto
a complejos: hay para todos los gustos y todas las exigencias de
los usuarios.
El predio en que se ubica Marina Cero cuenta con instalaciones apropiadas
para la práctica de varios deportes: una pileta de natación,
un salón de usos múltiples, un patio parquizado y
una cancha de fútbol, entre otros espacios. Hay departamentos
para 6 personas por $1400 a la semana (en enero) y de $875 para
4 personas.
Para optimizar la calidad de Las Grutas, Carlos Landivar es otro
de los prestadores privados que se ocupa cada vez más en
mejorar la. Ofrece viviendas con todos los servicios con precios
que van de los 80 a los 180 pesos por día.
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