VIEDMA.- Hoy se decidirá si los radicales se tomarán algún tiempo más para cerrar sus heridas o si ya no hay retorno. Si como se anunció la convención del partido se debe reunir el próximo 7 de febrero, hoy es el último día para hacer la convocatoria. En el balneario El Cóndor, el vicegobernador Bautista Mendioroz espera, con más fichas apostadas a un acuerdo interno que a una ruptura con su partido de origen, para emigrar a un frente con otras fuerzas. Agita el fantasma del quiebre definitivo, mientras sus emisarios sondean muy en firme cuantos espacios les va a reservar el veranismo en un nuevo y eventual gobierno provincial.
Una frase domina por estas horas el léxico de quienes se encolumnan con Mendioroz y se cobijan debajo del paraguas denominado Opción Radical: «No aceptaremos un acuerdo indigno». Esto es que les den dos o tres bancas de «morondanga» en la legislatura, cuando la legión de dirigentes a colocar es mucho mayor.
«Aún hay muchas posibilidades dentro del radicalismo», sostuvo mientras jugaba con la arena entre los dedos de sus pies un escudero mendiorista, que no apaga el teléfono ni a 500 kilómetros de la provincia.
Las partes en pugna han comenzado lo que las fuentes llaman un «nuevo camino de diálogo por los espacios», lo que indica que aún están en juego no solo bancas de la legislatura, sino también cargos de concejales y postulantes a intendente.
Miguel Saiz ha vuelto a reunirse con Mendioroz sin mayores avances, mientras el veranismo hace jugar su propio factor de presión, como es convertir a la convención en cuerpo electoral y, usando su amplia mayoría en ese cuerpo, designar a todos los candidatos sin mayores consultas a la oposición interna. Legalmente tienen la posibilidad de escoger ese camino, lo que no tienen garantizado es que nuevas heridas no alejen al radicalismo de un nuevo triunfo.
Incluso, con tal de no ir a una fractura total, se viene manejando la posibilidad de hacer internas «en algunos circuitos», lo que podría permitir al mendiorismo medir fuerzas luego de tanta especulación.
De esta manera, quedan aún varias instancias de negociación pendientes antes de que la sangre vuelva a llegar al río, como aquel día en que el tribunal electoral partidario calificó de inconstitucional la postulación de Mendioroz a la gobernación.

Invitados

Bajo el mismo sol, se contempla «la invitación que nos hizo (el justicialista Eduardo) Rosso», que excita a algunos mendioristas sedientos de revancha ante un veranismo «excluyente».
Las tratativas más firmas, para sondear la posibilidad de un frente electoral, las llevaron Mendioroz y el presidente del MPP, Julio Salto en un encuentro cara a cara. De esas conversaciones estuvo pendiente el intendente de Roca, Ricardo Sarandría.
Habrá, si se cumple el vaticinio de las fuentes, un nuevo encuentro entre el vicegobernador y Miguel Saiz, el candidato radical a suceder a Pablo Verani. Es por esto que las manifestaciones públicas sobre la interna, prometen ser conservadas en el freezer de la prudencia «al menos durante enero». Mendioroz estará pendiente a lo que ocurra hoy en el comité provincia, sobre todo en lo que hace al temario que se le impondrá a la convención, para saber si se definirán allí todas las candidaturas, o el veranismo deja un margen más para seguir negociando.