Por Marcia Cide
El regreso a clases tras el receso invernal llega con reclamos salariales
del sector docente. Sin cambios. Un conflicto que se extiende desde
fines del 2007 y una discusión en la que fue imposible encontrar
puntos de acuerdo.
Mientras el asesor paritario Alejandro Betelú asegura que en
el marco de medidas de fuerza es imposible el diálogo en busca
de soluciones, el titular del gremio docente, Marcelo Nervi, recuerda
que pasaron meses desde el último paro y que en ese período
no hubo convocatoria a paritaria.
Al contrapunto de reclamos, sostenido en lo que va del 2008, se suman
nuevos factores como la inflación que disparó los precios
de la canasta familiar, problema a afrontar en esta segunda parte
del año. Y que arroja elementos ineludibles a la discusión
por venir.
Mientras, la medida de fuerza está anunciada: el primer viernes
de agosto no habrá clases en la mayoría de las aulas.
Es la arremetida gremial en este tramo final del año. Le seguirán
dos jornadas más de paro, la siguiente semana. Claro, no si
antes se retomara la vía del diálogo y la negociación.
“Estuvimos cuatro meses sin medidas de fuerza, insistiendo en
la necesidad de paritarias, de construir un espacio de debate para
compensar la suba inflacionaria” dijo Nervi.
Del otro lado, tanto el ministro de Educación de la provincia
César Barbeito, como el propio gobernador Miguel Saiz, se mostraron
en distintas recorridas por obras en establecimientos escolares de
Río Negro.
Sobre lo salarial no se pronunciaron, aún cuando restan escasos
días para destrabar el conflicto. Del tema se ocupan, públicamente,
tanto Betelú como la Secretaría de Trabajo provincial,
también cuestionada desde el gremio a la hora de las mediaciones
y definiciones de conflictos, por tratarse de un organismo que depende
del Ejecutivo.
¿Cuáles son los ejes del reclamo? La discusión
se centra en los 1.400 pesos de bolsillo que percibe un docente que
se inicia en la tarea. Modificar ese valor en función de la
inflacionaria es el primer ítem que plantea el gremio.
Le sigue rever las modificaciones salariales aplicadas tras la paritaria
del 13 de marzo, que a la hora de las liquidaciones afectaron a un
sector específico del sector docente, el de carrera media.
Queda pendiente la restitución del 40% que en algún
momento percibió el sector como compensación por residir
en la región patagónica y que el gremio reclama para
que vuelva a tratarse en la mesa de discusión.
La intervención activa de la comunidad en reclamos por mejores
condiciones para la Educación dio resultado aún cuando
implicó largos procesos, como el del CEM 106 de Roca. Más
de un mes de manifestaciones, ocupación pacífica del
establecimiento, alumnos encadenados frente a funcionarios locales;
padres, profesores y alumnos que llegaron hasta Viedma en procura
de respuestas. Basados en la búsqueda del diálogo, del
encuentro. Y lograron su objetivo.
Una metodología que funcionarios y gremio docente, con el mismo
ímpetu, podrían adoptar para salir del extenso conflicto
salarial. Retomar la senda del diálogo parece ser el primero
y principal desafío pendiente en Educación.
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