Quito y Bogotá retomarían
el vínculo a nivel comercial en uno o dos meses, se informó
ayer en el marco de la asamblea de la OEA. Medellín
(dpa) > Ecuador restablecería con Colombia relaciones
a nivel de encargados de negocios en uno o dos meses, después
de que Quito rompió contactos debido a la incursión
de militares colombianos a su territorio y tras acusar Bogotá
a los ecuatorianos de apoyar a rebeldes, reveló ayer una fuente
diplomática, en el marco de la asamblea general de la Organización
de Estados Americanos (OEA) que comenzó ayer en Medellín.
El embajador ecuatoriano ante la OEA, Efraín Cocíos,
recordó que los vicecancilleres de ambos países han
estado dialogando para buscar alternativas en restablecer las relaciones
diplomáticas.
«Si las cosas marchan como están marchando hasta aquí,
se podría establecer o restablecer las relaciones diplomáticas
entre los dos países por lo menos a nivel de encargados de
negocios», sostuvo el diplomático a RCN Radio.
Para restablecer las relaciones diplomáticas, Ecuador exigió
a Colombia que archive «definitivamente» las supuestas
pruebas electrónicas examinadas por Interpol y que, según
Bogotá, lo vinculan con las FARC.
Computadoras
En ese sentido, Quito pidió ayer al secretario general de la
OEA, José Miguel Insulza, que estudie los documentos encontrados
en las computadoras del ex líder de la guerrilla colombiana
«Raúl Reyes».
La canciller ecuatoriana, María Isabel Salvador, aseguró
no temer las consecuencias que la medida pueda tener, porque su gobierno
tiene «la conciencia limpia», pero también confesó
no haberlas considerado a fondo.
«No le puedo decir qué quiero que él (Insulza)
haga. Lo que queremos es demostrar que no tenemos nada que ocultar»,
aseguró Salvador al hacer el anuncio en el marco de la Asamblea
General de la OEA (Organización de los Estados Americanos)
en la ciudad colombiana de Medellín.
Hasta ahora, la OEA no intervino en la polémica sobre las computadoras
porque ningún país se lo pidió, según
reiteró Insulza. El secretario general también aseguró
«respetar» la valoración de Interpol, que rechazó
que los documentos hubieran sido falsificados. |