En el marco del programa cultural “Café
Cultura Nación”, la escritora estará el miércoles
en Centenario y el jueves en la capital. Neuquén
> Con el objetivo de debatir sobre los procesos de aprendizaje
por los que pasa el escritor, la autora Ana María Shua se presentará
este miércoles en el Salón de Usos Múltiples
de la ciudad de Centenario (Islas Malvinas y Don Bosco) y un día
más tarde en el café del Museo Nacional de Bellas Artes
(Mitre y Santa Cruz) de esta ciudad.
Su llegada es como parte del programa cultural “Café
Cultura Nación”, y ambas presentaciones se producirán
a las 20 con entreda libre y gratuita.
La autora, que integra la propuesta desde sus comienzos en el 2005,
está recorriendo el país realizando una charla llamada
“Escribir es un camino”. En una entrevista con La Mañana
de Neuquén, la escritora explicó que su presencia en
la provincia tiene como objetivo dialogar con los presentes e instalar
como eje temático el aprendizaje que hace el escritor para
adquirir el arte de contar.
«Café Cultura Nación» tiene por objetivo
generar un debate y compartir perspectivas. «Me pareció
interesante la propuesta de la charla con el público, si bien
yo recorro el país dando conferencias y charlas de distinta
índoles, esto es diferente porque el eje es el diálogo”,
explicó Shua.
La respuesta del público
La escritora reconoció que el contacto con el público
es especial, en el que se aprende y enseña mutuamente. “Me
sorprendió mucho la respuesta del público. Algo a tener
en cuenta es que no siempre se genera el diálogo, ya que eso
depende de los presentes. Suele suceder que la gente siente pudor
de lo que puedan pensar sus conocidos, entonces no preguntan. De todos
modos estoy preparada para hablar frente al público, así
que puedo llevar adelante la charla.”, manifestó.
Por el formato de las charlas, los disertantes quedan expuestos a
toda clase de experiencias. “Hace un tiempo, en Formosa, un
señor insistía en que en el país había
escritores que estaban relegados, en referencia a Hugo Wast. Para
mí fue espantoso, porque se trata del sujeto que dijo: ‘Haga
patria, mate un judío’, y yo soy judía. Este señor
esperaba que elogiara a ese escritor. De todos modos, yo me reí
por la situación y, por suerte, el resto del auditorio entendía
lo que me pasaba”, recordó Shua, al tiempo que agregó
que «eso es lo rico de estas experiencias, donde todos pueden
participar”.
Valoración de la escritura
Consultada por su visión sobre la situación del escritor
en la actualidad, la autora subrayó: “Yo no tuve otra
opción que la de escribir. Escribo desde muy pequeña
y siempre disfruté del juego del lenguaje. Pero es cierto que
siempre hay un trasfondo oscuro en el arte de escribir, porque se
manifiesta una distancia entre eso que uno ha imaginado y aquello
que finalmente se plasma en el papel”.
Y agregó: “Además, es un momento muy bueno. La
industria editorial está creciendo como nunca. Me fijo en los
números, aunque es cierto que se habla de que cada vez se lee
menos. Eso tiene que ver con la decadencia de Occidente. Es esa sensación
de que el mundo está cada vez peor, entonces se traslada a
la escritura, pero los números dicen otra cosa”, concluyó.
Fruto de la experiencia
Ana María Shua viaja desde hace años brindando conferencias
y charlas que se suman a las actividades programadas de «Café
Cultura Nación». En cada uno de esos encuentros ha tenido
vivencias diferentes que la han enriquecido, aportándole ideas
para nuevas creaciones.
Con su talento innato para la literatura, redactó: “Ha
llegado un escritor”, que consideró el mejor lugar para
condensar sus experiencias, ya que la ficción del cuento le
permite hilar libremente las vivencias, agregar detalles pintorescos
e inventar personajes que dan vida a un entretenido relato.
El cuento todavía no tiene destino, ni fecha de publicación
porque hace apenas unos días Shua lo terminó de escribir.
Obras, cine y premios
En 1984, Shua escribió “Los amores de Laurita”,
una novela con rasgos eróticos que rompió todos los
esquemas del momento. El argumento narra las vivencias de Laura, una
mujer de 40 años que se entera que está embarazada.
En ese momento, la protagonista revive todos sus amores pasados y
lucha contra los prejuicios de una sexualidad plena durante el embarazo.
Antonio Ottone, director, tomó la historia y la llevó
al cine. La película se estrenó el 11 de septiembre
de 1986 -con la calificación: Apta para mayores de 18 años-,
film que se convirtió en uno de los más polémicos
del momento. Los protagonistas fueron Alicia Zanca, Víctor
Laplace y Daniel Fanego.
Obras premiadas
La escritora, además, fue muy prolífica, incursionando
en diferentes géneros y estilos. Ésto llevó a
Shua a ser reconocida en varias oportunidades, como por ejemplo con
la novela “Soy paciente”, con la que obtuvo el primer
premio en el Concurso internacional de narrativa, de Editorial Losada.
También consiguió el tercer premio municipal y logró
que la novela fuese llevada al cine por Rodolfo Corral.
Además, con el libro “La fábrica del terror II”
(1988), obtuvo el premio Cuadro de Honor Municipalidad de Tucumán
y el premio “Destacado” de Alija. Shua también
se quedó con el premio “Club del Progreso” en ciencia
ficción, en 2003. |