Por Vicky Chávez
Hoy, su legado es continuado por su hijo Gustavo quien,
a su vez, es presidente de la Asociación Argentina de Enfermedades
Respiratorias.
Neuquén
> Durante el primer gobierno constitucional de la novel
provincia neuquina, el vicegobernador a cargo de la gobernación,
don Alfredo Asmar, inauguró el Centro Provincial de Lucha Antituberculosa,
bajo la dirección del doctor Enrique Zabert. Para esto se firmó
un acuerdo bipartito entre los gobiernos nacional y provincial, con
la asesoría de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
para organizar la lucha antituberculosa. Pero la historia no comienza
aquí.
El doctor Zabert nació en Rosario el 24 de enero de 1923. Hijo
de Vicente Zabert, un italiano del Piamonte, y de Petronila Burgra,
quien tambien era de familia piamontesa, chacarera nacida en
la provincia de Córdoba. Enfatiza la actividad porque “eran
trabajadores de sol a sol”, “ejemplo de trabajo”,
todo esto para hacer alusión a los momentos que viven hoy los
trabajadores rurales.
Cuando Vicente Zabert llegó de Italia antes de 1914 se fue
primero a trabajar de mozo en Retiro; como era de profesión
hotelero se fue a Rosario en donde tuvo el hotel “La Paz ”.
Se casó con Petronila en Córdoba quien no hablaba
castellano, sólo piamontés.
De esta unión nacieron 4 hijos: Francisco (hotelero como su
padre); Enrique (médico); Ángela (maestra); Santiago
(fallecido de muy pequeño de meningitis).
Zabert estudió en la escuela Dante Alighieri de Rosario,
escuela bilingüe de doble escolaridad donde cursó la primaria
y la secundaria. Estudió luego en la Universidad del Litoral,
de donde egresó como Médico Cirujano.
Allí ejerció su profesión en la Cátedra
de Enfermedades infecciosas y del Centro antituberculoso de la ciudad
de Rosario.
Formó su familia en 1958, con otra rosarina Delia Carolina
Vimo que siendo maestra ejercía en una escuela en donde el
doctor Enrique fue a realizar un catastro escolar. De esta unión
nacieron dos hijos: Gustavo (médico) y Jorgelina.
El tratamiento
El arribo a nuestra provincia fue cuando la Dirección
Nacional de Tuberculosis llamó a concurso para médicos
neumonólogos con destino a distintas provincias.
Realizado el concurso salió primero y como no colocó
el destino en la ficha de inscripción lo habían destinado
a Río Gallegos, pero decidió no ir y lo nombraron a
cargo del Programa de Tuberculosis de la provincia neuquina en el
año 1960.
Vino contratado y le proveían casa para vivir con su familia
en la calle Independencia, luego se mudó a la calle Elordi
y posteriormente compró la casa de la calle Ministro González
al 500, hoy consultorios médicos.
En estas tierras se estaba organizando todo lo concerniente a la salud
pública, es así que el gobernador Asmar lo puso a cargo
del Programa de Tuberculosis de esta provincia.
Como en el hospital neuquino –en esos momentos bajo la dirección
del doctor Ángel N. Romero- no había instalaciones para
trabajar, Zabert se asentó en la calle Juan B. Justo esquina
Santiago del Estero. Posteriormente se trasladó con todo su
equipo al hospital Bouquet Roldán que en ese momento era un
geriátrico.
Recuerda que los doctores Elsa Moreno y Néstor Perrone lo nombraron
director del hospital Bouquet Roldán.
La organización de la Salud Pública en la nueva provincia,
recordemos que Neuquén acababa de provincializarse, debe dictar
su Carta Magna y transitar el primer gobierno provincial.
Zabert recuerda que “en el Hospital Provincial los únicos
Programas organizados eran el Centro materno Infantil a cargo del
doctor Víctor Peláez y el Centro Provincial de Lucha
antituberculosa a cargo del Dr. Zabert.
El primer tratamiento supervisado antituberculoso: se organizó
la dirección de lucha antituberculosa y se inauguró
el primer dispensario de vías respiratorias. Las investigaciones
para controlar la tuberculosis fueron acompañadas por un equipo
de la OMS. Para esto se realizaba el tratamiento domiciliario
supervisado a través del cual pudo impedir que los pacientes
abandonen su curación.
Se crearon dispensarios de la Lucha Antituberculosa en Cutral Co,
San Martín de los Andes y Zapala.
Rememora que el Plan de Salud de la Provincia se organizó en
los años ‘70 con el doctor Perrone, siendo ministro el
recientemente desaparecido Dr. Alberto Del Vas.
Continuando con los recuerdos dijo: «Trabajábamos con
abreugrafías (radiografias pequeñas) que venían
en rollo de 300 placas, esto nos permitía examinar mucha población
a bajo costo, se usaba para catastros, para detectar enfermos.
Legado
La lucha antituberculosa fue un plan destinado a detectar los casos
de tuberculosis; para esto hicieron catastro de la enfermedad
en Neuquén Capital, Centenario, Plaza Huincul, Cutral Co, Zapala,
Junín de los Andes, Loncopué y Las Lajas. Se trasladaban
con todo el equipo y poseían la medicación necesaria
para tratarla.
El fantasma que se les presentó fueron los abundantes casos
de quistes hidatídicos y en Junín fueron cifras altísimas.
Nos cuenta que examinaron 50.000 radiografías realizadas a
los soldados que iban a cumplir con el Servicio Militar.
Cuando se detectaron 50 casos en Loncopué, se enviaron 40 de
ellos a operar a Buenos Aires, en avión, debido a que en la
provincia en ese momento carecía de la infraestructura necesaria.
Entre los años 1960 a 1969 el problema que se les planteó
es que no tenían hospital para tratar los casos de tuberculosis,
por lo que iniciaron el tratamiento domiciliario supervisado.
El Plan de la Lucha antituberculosa fue tomado como modelo. Llegaron
a la provincia becarios de Perú, México, Brasil y supervisores
de la OMS.
Un verdadero trabajo en equipo, relata Zabert, conformado por
enfermeras, chofer, bioquímicos, estadísticos, asistentes
sociales, mucamas. El doctor hace la salvedad de que no quiere dar
nombres para no olvidarse de alguno, pues todos eran importantes.
Cabe destacar que la provincia fue avanzada en tratamiento domiciliario
de Tuberculosis y su tratamiento y la seriedad con la que supervisaban.
Además de venir equipos de supervisores españoles, suecos
y daneses, también vinieron ministros nacionales como Rodríguez
Castells, Abraham Sonis, entre otros, a controlar el programa que
era nacional, para posteriormente delegarlo a la provincia, que le
prestó un apoyo incondicional al plan de lucha antituberculosa.
Esta forma de trabajar en la lucha contra la tuberculosis fue condensada
en un trabajo de publicación presentado en Toronto (Canadá)
por el hijo de Enrique, Gustavo, quienes publicaron casos en tratamiento
supervisado. En la actualidad, Gustavo es presidente de la Asociación
Argentina de Enfermedades Respiratorias.
Gracias a su constante lucha contra la tuberculosis, el doctor Enrique
Ildefonso Zabert recibió el premio «Mayor Notable»,
otorgado por la Cámara de Diputados de la Nación.
Detalles de vida
El doctor Enrique Zabert se jubiló en el año 1992
y continuó con la actividad privada.
Es miembro de las siguientes instituciones: Academia Nacional de
Medicina de Bs. As y de Córdoba de la Unión Internacional
de Tuberculosis y la Asociación Internacional de hidatología.
Es miembro Honorario de la Asociación Argentina de enfermedades
respiratorias.
Tiene 5 nietos: Horacio, el mayor, es hotelero; Ignacio, médico;
Francisco, economista, María Jorgelina estudia Diseño
de indumentaria y textil, y el más pequeño, Benjamín,
comenzó la secundaria. |