| Aunque el sector no transita un
momento extraordinario, lo hace en un escenario más favorable
que hace cuatro o cinco años.
Neuquén > Los tacheros de todo el país
celebran hoy su día, pero atento a la época del mes
-con cobro de salarios de los potenciales usuarios del servicio-,
los taxistas suelen festejar arriba del auto.
Los trabajadores del volante pertenecen al grupo de agentes económicamente
activos que más rápido perciben cualquier vaivén
de la situación nacional, regional y local.
Y hoy aunque el sector no transita un momento extraordinario, lo hace
en un escenario más favorable que hace cuatro o cinco años.
El resto, los problemas de siempre como tarifas, modernización
del parque automotor, seguridad, blanqueo de choferes y muchas otras
características de esta actividad, siguen siendo los mismos.
Eduardo Lira es, desde hace pocos días, el titular del Sindicato
de Peones de Taxis del Neuquén y además de saludar a
todos los trabajadores del sector, repasó el escenario local
de la actividad.
En ese sentido sostuvo que “si bien no se está en nivel
extraordinario, se está bastante mejor que hace cuatro o cinco
años; eso se nota a partir del crecimiento de la ciudad, del
turismo y de muchas actividades que se traducen en una mayor demanda
del servicio”.
Actualmente, en la capital neuquina circulan entre 500 y 550 taxis
locales, y se estima que en poco tiempo más podría incrementarse
el parque con el otorgamiento de nuevas licencias y por ende, la correspondiente
generación de nuevos puestos de empleo.
También explicó que el parque automotor neuquino está
en muy buen estado, con unidades que en su mayoría son superiores
al modelo 2004.
Lira agregó que el mercado laboral está en condiciones
de absorber nuevos taxistas ya que existe una faltante de taxistas
y unidades para cubrir la demanda de la capital neuquina.
Se estima que son entre 800 y 850 los taxistas que tiene la actividad
en la capital neuquina, y se podrían sumar en el corto plazo,
cerca de 60 nuevos choferes.
Entre las acciones a llevar adelante, está prevista la capacitación
de los trabajadores que se sumarán al mercado local con conocimientos
de primeros auxilios o, por caso, información turística.
En cuanto a los problemas el sector, Lira indicó que mantuvieron
una reunión con autoridades policiales para poder avanzar en
esquemas de prevención, es decir, los recaudos que deben tomar
los trabajadores ante situaciones sospechosas.
La bajada de bandera en la capital neuquina tiene un valor de 2,28
pesos más la ficha –que cambia cada 100 metros- que tiene
un valor de 0,165 pesos.
“Quiero enviar un saludo cordial a todos los trabajadores colegas
de Neuquén y del resto de las localidades de la región,
deseándoles además que puedan seguir trabajando en mejores
condiciones cada día”, finalizó Lira.
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