|
24 variedades de pizzas, 4 de calzones
y una amplia oferta de gastronomía clásica conforman
la carta de esta tradicional cadena.
Neuquén> Haber logrado combinar dos cocinas
tan antiguas como lo son la italiana y la alemana, no es poca cosa.
El Munich y la pizza, el sabor y la frescura, los condimentos y la
masa, el tío Franz y Don Peppone. De todo eso y de muchas características
más surgió, a comienzos de los ‘90, un emprendimiento
que aún hoy no sólo es un lugar de paso sino que además
se ha extendido en todo el Alto Valle.
24 variedades de pizzas, 4 de calzones y una amplia oferta de gastronomía
clásica conforman la carta de esta tradicional cadena regional
de pizzerías.
Aún hoy, Franz y Peppone sigue conservando el mismo espíritu
que llevó a un visionario neuquino a crear, instalar y hacer
propia de todos los habitantes de la zona, la marca de un lugar con
aire familiar.
Los pioneros
“Mi padre eligió la esquina de diagonal 9 de Julio y
Belgrano para poner primero una cervecería a la que le anexó
luego la pizzería. Así surgió Franz y Peppone”,
indicó Pablo Chamatropulos, uno de los integrantes de la familia
fundadora de esta marca registrada.
Hoy cuenta con más de 20 empleados, entre ellos cinco pizzeros.
Pablo, cuando está en la región, trabaja en el local
central y lo hace desde la cocina misma ya que, por esas cosas de
la vida, aprendió un día a hacer pizzas. Incluso, al
momento de la consulta periodística, Pablo se encontraba “revoleando”
masas circulares por el aire.
“La masa, elaborada de manera artesanal como hace 300 años,
descansa más y queda más aireada”, explicó.
Es como que no sufre fatiga. El horno a leña y su cocción
sobre la piedra del horno harán el resto. Más tarde,
vendrá el vestido de la masa y los toques mágicos de
cada maestro pizzero.
Pablo resaltó dos características de Franz y Peppone.
Por un lado, la búsqueda constante por el mejor servicio y,
por otro, la combinación de esa comida típica italiana
con algunas variantes que ofrece la región.
De hecho, comentó, hay algunas variedades que están
captando más cantidad de paladares. Se trata de las pizzas
con sabores gourmet. Una de las especialidades más demandadas
es la pizza con ahumados patagónicos, para la cual se utilizan
productos traídos de Bariloche, y una segunda opción
también es la de Rúcula, entre muchas otras alternativas.
Franz y Peppone cuenta, además de la casa central, con 8 sucursales
distribuidas en Neuquén capital, General Roca, Cipolletti,
Plottier, Cinco Saltos, Centenario y Cutral Co. La tradicional casa
de comidas aprovechó para saludar en este día a sus
empleados en general, y a sus pizzeros en forma particular.
El origen de la fecha elegida
Neuquén > El 12 de enero se festeja el
Día del Pizzero en consonancia con otras ramas del gremio de
los confiteros, pasteleros y reposteros, con motivo de la celebración
del convenio colectivo de trabajo.
La pizza llega a Buenos Aires a fines del siglo pasado, con la llegada
de las primeras corrientes de inmigrantes italianos. Esa costumbre,
entre las pocas cosas que pudieron traer los italianos, fue adoptada
rápidamente en este país.
Los elementos del pizzero, que recorría las calles de Buenos
Aires a fines del siglo pasado ofertando su producto, eran simplemente
un trípode y una campana de lata. Sus consumidores eran comensales
ocasionales y de paso.
De La Boca al mundo
Pero la pizzería tal como se la conoce, nació en el
barrio de La Boca, donde la pizza comenzó a atraer a habitantes
de otras nacionalidades, aparte de los italianos.
Aunque hay distintas versiones, los maestros pizzeros conservan una
información.
En algunos casos, transmiten esos pequeños secretos a un discípulo
preferido, o bien, morirán con su técnica. Al margen
de cada receta, se coincide en que la verdadera llave del saber oculto
está en la elaboración de la masa. Y, como se sabe,
hay muchas formas de lograr esa base, que será en definitiva
el cimiento de las pizzas.
Cuando la masa haya alcanzado su forma ideal, vendrá el resto,
es decir, los condimentos. Pero, como dijo un maestro pizzero, todo
lo que le pongan encima, es sólo eso, “el resto”.
El alimento más antiguo
Neuquén > La pizza se originó hace
tres mil años a partir de antiguos bollos planos o pies preparados
en piedras abrasivas, y fue el primer tipo de pan no levantado consumido
por los humanos.
Cuando se descubrió el secreto de las levaduras por parte de
los egipcios, esa masa que allí adquirió una forma elevada,
nunca más dejó de ser consumida en el mundo.
El término “pizza” proviene de la palabra latina
“pinsa”, que es el participio en pasado del verbo latín
“pinsere”, que significa “aplastar”, según
informa el sitio Food-info.Net. Muchas civilizaciones que vivían
en las áreas mediterráneas, como los egipcios, los griegos
y los romanos estaban acostumbrados a comer bollos planos o pies elaborados
a partir de granos de cebada, agua y diferentes sazonadores. Desde
luego, estos bollos planos o pies pueden considerarse como los “ancestros
de la pizza”.
A través de los siglos, los bollos planos crecieron en forma
similar al tipo de pizza que existen en estos días. Los ingredientes
más conocidos son mozzarella y tomate, los más típicos
e importantes.
Dos eventos históricos hay que tomar en cuenta en la introducción
de la mozzarella y el tomate en Italia.
Después de la caída del Imperio Romano, la invasión
del sur de Italia por los Longobardos (tribú alemana) llevó
a la introducción de las cabezas de búfalo en Italia.
A partir de entonces, la leche de búfalo fue utilizada por
la gente local para la producción de “mozzarella”.
La importación de tomate desde Sur América (Perú)
a Europa se produjo luego del descubrimiento del Nuevo Mundo (América)
y ese ingrediente hizo el resto.
La primera
La primera pizzería “moderna” fue establecida en
1780 en Nápoles por Pietro Colicchio, quien nombró su
local “Pietro e basta Cosi”. Luego de más de cien
años, esta pizzería aún existe, pero ha sido
renombrada como “Antigua Pizzería Brandi”.
En el transcurso de los años, la gestión de la pizzería
“Pietro e basta Cosi” fue dada a Enrico Brandi, ya que
Pietro Colicchio no tenía hijos, tal como indica la reseña
del mencionado sitio. |
|