Por maría argel
Cuándo serán las elecciones de gobernador y legisladores
en Río Negro es uno de los interrogantes cuya respuesta está
estrechamente ligada a los resultados que se obtuvieron en Bariloche
el 24 de septiembre pasado.
Esta facultad exclusiva del gobernador Miguel Saiz estará atada
también al guiñe que desde Nación haga el Presidente
Néstor Kirchner. Por ahora, la fecha tentativa para las próximas
elecciones provinciales sería mayo de 2007. Para entonces,
la convocatoria sería sólo para elegir al gobernador
y los integrantes de la Legislatura, de manera separada de los cargos
municipales y de los nacionales.
La decisión no es caprichosa ni novedosa en Río Negro.
Durante el gobierno de Pablo Verani se designaron en su momento fechas
desdobladas con el mismo objetivo con el que se lo hará ahora:
evitar que el “arrastre” de votos del gobierno nacional
perjudique las aspiraciones del partido gobernante. Esta vez, en el
caso de Bariloche, hay otra preocupación y es la de evitar
que el “efecto Icare” se vuelva en contra.
Estrategias
Concientes del mensaje contundente que envió Bariloche a través
de las urnas en las recientes elecciones de convencionales, el gobierno
provincial está sumido en armar nuevas estrategias para recuperar
la gobernabilidad en esa ciudad. Ello es así no sólo
con el fin de liderar el principal distrito electoral de la provincia
sino porque de ella depende ahora retener el gobierno de la provincia
en 2007. Por eso es que una de las primeras medidas a tomar en la
ciudad de lagos y montañas es el recambio de los responsables
en las delegaciones provinciales, lo que abarca a las áreas
de Educación, Salud, Seguridad, Acción Social, Viviendas,
además de las empresas públicas y otros servicios que
presta el Estado.
Es que existe disconformidad con los resultados, a juzgar por las
constantes demandas de los barilochenses. Una de las áreas
más sensibles y endebles a la hora de hablar de las respuestas
es la de Educación, donde los docentes están otra vez
en vísperas de nuevas medidas de fuerza para reclamar por mejoras
salariales y de las condiciones de trabajo en las escuelas.
El Frente
Mientras tanto, el Frente para la Victoria gana en confianza y se
anima a proyectar un futuro sin radicales en la Casa de Gobierno de
Viedma.
La semana que pasó tuvo gestos muy importantes. El Presidente
Néstor Kirchner y su ministro más influyente, Julio
de Vido, recibieron en la Casa Rosada tanto al intendente Alberto
Icare como al senador Miguel Pichetto. Ambos recibieron las felicitaciones
por los resultados de las elecciones del 24 de septiembre y posaron
una vez más para la codiciada foto con el Presidente. El gobierno
nacional prometió obras por $50.000.000 para Bariloche. No
es una promesa nueva. En realidad reiteró la que ya hizo a
la ciudad en julio de 2005, cuando las fuertes lluvias provocaron
derrumbes y otros destrozos. Pero, aquella vez Icare era aliado del
partido gobernante en Viedma y ahora otros aires políticos
soplan en el Centro Cívico. Por eso es que esta vez se espera
que lo anunciado se haga realidad. Aunque, con el advenimiento de
los denominados Radicales K, que este fin de semana tendrán
un nuevo encuentro en Córdoba, al que asistirá el gobernador
Miguel Saiz, ya no estamos hablando de blanco o negro en política.
El 2007 avizora otras alternativas. |