Por María Argel
Como provincia fronteriza, Río Negro se sintió afectada
esta semana con la decisión de la Secretaría de Energía
de la Nación de disponer de un precio diferencial en los combustibles
para los turistas extranjeros.
La medida anunciada por el secretario Daniel Cameron provocó
un fuerte rechazo no sólo de los sectores privados vinculados
al turismo si no también de los políticos de la región,
ya que se considera que significará un retroceso importante
para una actividad que se viene consolidando a paso firme desde los
últimos años.
La principal preocupación es que se produzca una merma en el
turismo chileno, sobre todo luego de la fuerte reacción que
tuvo la presidenta Bachelet del otro lado de la Cordillera.
El turismo internacional, por su condición de exportador de
servicios, genera el ingreso de divisas genuinas para las localidades
turísticas de la región y esta aparición del
aumento en los combustibles en las zonas fronterizas asoma como una
amenaza para una actividad que logró una recuperación
asombrosa tras la crisis de 2001.
Por ello, las expectativas del sector oficial y privado es que se
revea la medida y que, al menos, sólo tenga vigencia para el
transporte de cargas.
Chispazos
A su regreso de la India, el gobernador Miguel Saiz debió afrontar
dos fuertes chispazos: uno proveniente de la oposición, en
la figura de Julio Arriaga; y el otro, llamativamente, desde el fuero
interno de su Gabinete, con su ministro de Hacienda, Pablo Verani.
Además, los intendentes del Frente para la Victoria le transmitieron
al ministro Aníbal Fernández su preocupación
por los atrasos en el envío de las remesas de coparticipación.
En los tres casos se pone en duda la tranquilidad financiera de la
provincia y su capacidad de hacer frente a los compromisos asumidos,
tras la nueva recomposición salarial.
Que las dudas provengan de la oposición suena lógico,
pero causó sorpresa que el ministro Pablo Verani, ahora regresando
de un viaje a Colombia, alerte sobre la fragilidad del equilibrio
en las cuentas. Apenas ponga un pie en Viedma, el concepto vertido
por Verani sin duda será un tema del que el gobernador Saiz
pedirá explicaciones.
Gestos
El Bloque Radical en el Congreso se comportó de manera diferente
a lo que se preveía en los últimos días, en lo
que se refiere a la polémica y tan criticada ley de superpoderes.
Los rionegrinos en el Parlamento se abroquelaron a la actitud del
presidente del bloque, Ernesto Sanz, y no estuvieron a la hora de
levantar las manos para la aprobación.
Allegados al gobierno aseguraron que “no hubo una acción
orquestada” para esta votación y que se dejó librado
al criterio de cada representante. Sin embargo, lo que no asoma como
explicable aún es de qué manera el gobierno rionegrino
espera demostrarle su acercamiento al presidente Kirchner, para ganar
su apoyo para las próximas elecciones. A pesar de que los votos
no eran necesarios en número, eran importantes a la hora de
los gestos, esas demostraciones de que hay un alineamiento con las
decisiones del Presidente. |