Por Cecilia Soberón
El municipio de Cutral Co espera impaciente los recursos que deben
llegar desde el ENIM, el ente autárquico que comparte con Plaza
Huincul y que tiene la misión de administrar los fondos que
genera el yacimiento El Mangrullo.
El envío, por un monto de 3 millones y medio, se demora por
la indefinición de parte del Concejo Deliberante de Plaza Huincul
que por estas horas se debate en medio de la crisis institucional.
El intendente Ramón Rioseco mostró su fastidio por la
tardanza. Con cada día aumenta su enojo con el ENIM, una institución
a la que considera literalmente inservible.
Más allá de las evaluaciones que podrían hacerse
de la actuación del ENIM durante sus años de creación,
existe una ley que lo avala, una ley que fue sancionada después
de muchos meses de debate, con la intención de impedir que
los intendentes de turno utilicen en gastos corrientes los fondos
que genere el yacimiento.
Ese dinero debía ocuparse en la reconversión productiva
que nunca llega y para la que el ente nunca aportó más
que buenas intenciones. Ya se sabe, el infierno está lleno
de bienintencionados.
Los intendentes, los anteriores y los actuales, han utilizado más
de una farsa para retirar dinero del ENIM. Si se concreta el envío
de los 3 millones y medio para cada comuna habrán retirado
de sus fondos unos 7 millones 600 mil pesos cada uno. Con el retiro
de los 3,5 millones, los municipios se llevarán el 70% de los
fondos disponibles en el ente.
La historia marca que entre Eduardo Benítez y Alberto Pérez
acordaron primero el retiro de un millón de pesos cada uno,
años después fue un millón 600 mil pesos. Ya
en la gestión de Silvia Otaño en Huincul y con la continuidad
de Benítez en Cutral Co se retiró un millón y
medio más. Ahora los intendentes Rioseco y Crespo pretenden
una “división” virtual de los fondos, van más
allá que sus antecesores y piden 3,5 millones.
¿Y el dinero?
Los municipios cuentan con un 10% del total de regalías generadas
por el yacimiento, dinero que debe destinarse a infraestructura productiva.
Hasta ahora son pocas las noticias de dónde fue a parar el
dinero solicitado. Con la última entrega las comunas se habrán
gastado 9 años de regalías, aún considerando
que el yacimiento triplique su producción.
En Cutral Co, la oposición al retiro de más dinero por
parte de Carlos Moraña fue en vano, en Huincul todavía
no se aprueba el proyecto, pero se sabe que existe una férrea
oposición del concejal Gustavo Rodríguez.
El manejo de los fondos del ENIM ha sido discrecional por parte de
la dirigencia local, tal vez sea hora que el dueño del yacimiento
(que sigue siendo la provincia porque solamente lo cedió por
99 años) intervenga para evaluar seriamente si la idea de aquellos
legisladores de crear el ente resultó como se esperaba.
Por ahora, es solamente una lucha de poder que impide cualquier acuerdo
de desarrollo conjunto. Mientras tanto, la población sólo
recuerda el ENIM para el reclamo y la queja por sus insuficiencias
y rara vez se pregunta quién es responsable de la buena o mala
utilización de los fondos.
Se impone entonces un debate profundo sobre el futuro del ente, que
es lo mismo que discutir sobre el futuro de ambas localidades.
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