Por maría argel
La semana política de Río Negro estuvo impregnada por
los aires de la Concertación, que hizo que rivales como
Carlos Soria y Miguel Saiz, estuvieran bajo el mismo paraguas K en
el acto por el aniversario de General Roca.
Luego de la euforia por la visita del matrimonio presidencial a la
provincia, cada político volvió a su espacio y a sumergirse
en el ambiente electoral que propone este 2 de septiembre.
Fue la séptima vez que el Presidente Kirchner visitó
Río Negro, una provincia que ha tenido gestos y acciones políticas
afines al gobierno nacional y que puede exhibirse como un territorio
donde la prédica de la Concertación, de la transversalidad,
ha caído en tierra fértil.
Río Negro es una muestra de la capacidad que tuvo la política
de Kirchner de sumar a quienes antes eran sus adversarios y de fortalecerse
frente a los nuevos rivales que asoman en el actual escenario electoral,
muchos de ellos, casualmente, de su propio partido.
Es una provincia afín y de la que se espera que sea crucial
para el proyectado triunfo de la fórmula Cristina-Cobos. Por
eso no es extraño ni suena a cumplido que el Presidente y su
esposa se sientan “como en casa”.
Elecciones
Hoy el gobierno provincial sabe que tendrá un nuevo test electoral
y su aspiración es recuperar su supremacía en localidades
que hasta ahora le son adversas. Entre ellas, la más importante,
en Cipolletti, se busca cortar y desmitificar el dominio del Frente
Grande y, por añadidura, de Julio Arriaga.
No obstante, representantes del gobierno radical admiten por estos
días que no podrán, por ahora, recuperar la conducción
de lugares como General Roca y Cipolletti. Por ello, la apuesta ha
sido fuerte en localidades periféricas, como las de la Línea
Sur, donde se aguardan los resultados más favorables para la
jornada de hoy.
En los últimos días, y mirando hacia las elecciones
de legisladores nacionales de octubre, hubo un acercamiento entre
el candidato a diputado de la UCR, Pablo Verani, y el intendente Alberto
Icare, de Bariloche. Aparentemente, el interés es que Icare
“no trabaje” para Pichetto en las próximas elecciones
a cambio de reactivar obras públicas importantes para la ciudad.
La versión gana fuerza con el pedido público que hizo
Sur, el partido de Icare, de tener su espacio propio en el Frente
para la Victoria y exigir un lugar en la lista de los candidatos a
diputados o senadores. ¿Pichetto se dará por aludido?
Catedral
En los últimos actos públicos de Bariloche, el gobernador
Miguel Saiz ha exhibido con orgullo los “logros” de un
Catedral unificado y defendió la férrea decisión
política que tuvo en su momento de prorrogar la concesión
a la empresa que estuvo en convocatoria de acreedores, Catedral Alta
Patagonia.
Sin embargo, hoy el centro invernal le está dando importantes
dolores de cabeza. Por un lado, se está discutiendo la transferencia,
con deudas incluidas, del dominio de la tierra del cerro; y por otro,
en estos días la inseguridad en el centro de esquí,
con un nuevo accidente en los medios de elevación, volvió
a poner en dudas la idoneidad de la empresa. Ello tiene fuertes implicancias
políticas ya que el gobierno, en caso de comprobar “faltas
graves” podría quitarle la concesión. Ese es un
tema espinoso que se debatió casi medio año, entre fines
de 2003 y principios de 2004 y que generó agudas discusiones
y divisiones políticas y empresarias. Ahora, más allá
de los errores que puede cometer la empresa, la responsabilidad también
recae sobre el deber de control y fiscalización del Estado.
Entonces, ¿cómo resolverá ahora el gobierno esta
nueva encrucijada? ¿Sancionará a la empresa? Y lo más
importante: ¿Cómo hará para que el cerro vuelva
a ser confiable en materia de seguridad?.
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