Por ramiro morales
El viernes, el último día del receso invernal, el gobierno
dio una señal inequívoca de lo que pretende para la
segunda mitad de un año lectivo que arrancó, acaso,
como uno de los más dramáticos que se recuerde en la
historia contemporánea de la provincia.
A través de la titular de la cartera educativa, Mara Álvarez,
anunció, por un lado, que se apresta a crear cargos de preceptores
para los jardines de infantes que funcionan como salas anexas en las
escuelas; y por el otro, el inminente llamado de concursos de ascenso
para cargos directivos en el nivel primario.
Ambos anuncios parecieron endulzar los oídos de los dirigentes
del gremio Aten, pues desde esa formación sindical venían
reclamando insistentemente estas medidas a las que consideran como
una suerte de “reivindicación histórica”
para el mundo docente neuquino.
Sin embargo, los anuncios no sólo deberían circunscribirse
a una mera cuestión de recursos humanos. Por el contrario,
constituyen una muestra de que -ya en el ocaso de su período
de gobierno-, las actuales autoridades provinciales aspiran, a un
tiempo, a reducir los focos de posibles conflictos con el gremio docente
y, en consecuencia, a un epílogo pacífico del ciclo
lectivo en el que se han perdido ya demasiados días de clases
a un costo demasiado alto y aún difícil de mensurar.
Más posibilidades
El que se sigue posicionando en su candidatura presidencial es el
gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, quien luego de una nueva
reunión con los máximos referentes del peronismo disidente,
manifestó que tiene más posibilidades que el resto de
los dirigentes de ser el postulante de este sector político.
Si bien resta menos de un mes para el anuncio oficial, es muy probable
que los integrantes de la fórmula se definan antes. Las versiones
que indicaron un posible acercamiento entre Ramón Puerta y
Mauricio Macri, terminan de posicionar el mandatario neuquino como
el principal aspirante a ocupar la candidatura a presidente de la
Nación por el PJ anti-K.
Hacia el consenso
En el plano provincial, esta semana será clave para determinar
si el Movimiento Popular Neuquino irá a las internas que están
convocadas para el 26 de agosto para definir los candidatos a diputados
y senadores nacionales para competir el 28 de octubre.
Por estos días, la fórmula electa, Jorge Sapag-Ana Pechen,
está abocada a la búsqueda de acuerdos con reuniones
con los sectores partidarios, pero con la idea de mantener una coherencia
en relación a las posturas políticas.
Aunque durante las últimas semanas se multiplicaron los nombres
de quienes aspiran a ocupar una banca en el Congreso nacional por
el MPN, los dirigentes estiman que no habrá un comicio interno
porque, la gran mayoría de los precandidatos, se encolumnan
detrás de la fórmula ganadora el 3 de junio.
Un gesto que ratifica este pensamiento es que el senador nacional
Pedro Salvatori, quien pretende repetir el mandato, afirmó
que está trabajando para que no haya interna y que acatará
la definición que salga por consenso.
De esta manera, dejó a entrever que está dispuesto a
bajarse de su candidatura.
Gabinete, en noviembre
Un párrafo aparte merecen también los encuentros
que comenzarán en breve entre los funcionarios electos y los
miembros del gabinete actual para lograr una transición de
gobierno ordenada.
En este contexto, el gobernador electo, Jorge Sapag, reiteró
que hasta noviembre no se conocerán los nombres de los integrantes
de su gabinete.
Cada vez más lejos
En tanto, en la oposición provincial ya son innumerables las
negociaciones que existen entre los candidatos a intendente de Neuquén
capital. Sin embargo, la unidad parece cada vez más lejana
porque, a priori, los principales referentes no muestran una predisposición
real a desistir de su postulación para apoyar a otro aspirante
a la jefatura comunal.
A pesar de varias reuniones, las posturas de Martín Farizano
y Oscar Massei no hacen pensar que uno de los dos se bajará.
También Mariano Mansilla se ve alejado del consenso porque
desde el sector que encabeza analizaron como un gesto realmente negativo
la reunión que tuvo Heriberto Chureo, quien se arrogó
la representación de UNE, con Jesús Escobar, que está
trabajando con Massei en lo que sería el único foco
de unidad que se visualiza por ahora.
Está claro que si no hay consenso en la oposición, será
muy difícil que el diputado nacional José Brillo no
gane las elecciones municipales del 28 de octubre.
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