Una joven se quebró y se presentó
ante la Policía del conurbano bonaerense. Reconoció su
participación en un crimen. Buenos Aires
(Télam) > Una joven de 21 años quedó
detenida ayer luego de que se presentó en la comisaría
de la localidad bonaerense de William Morris y aseguró haber
participado la noche del viernes pasado del asalto y tiroteo en el
que fueron asesinados dos vecinos de Hurlingham.
Fuentes policiales informaron que la chica se presentó al mediodía
en la seccional ubicada en La Valle y Potosí, en dicha localidad
del oeste del conurbano, y reconoció ante los policías
y testigos su participación en los homicidios de Gabriel Alfredo
Pasti (40) y Angel Fente (52).
«La joven se presentó espontáneamente y dijo que
se sentía abrumada por la culpa», explicó un jefe
policial que investiga el doble crimen.
La fuente consultada señaló que la joven no dio detalles
de cómo fue su participación en el asalto y tiroteo,
salvo que admitió que se utilizó en el hecho una pistola
9 milímetros, que aún no fue hallada por la policía.
Ante estos dichos, que no tienen validez judicial para la causa ya
que fueron realizados ante la policía, el fiscal de Morón
Mario Ravizzini, ordenó la detención de la joven, a
quien indagará mañana, dijeron los informantes.
Según las fuentes, la sospechosa reside en William Morris y
habitualmente iba a visitar a los detenidos en esa comisaría,
por lo que se procura determinar si está vinculada con el ex
convicto que ya fue detenido herido por los homicidios.
Con la detención de esta joven, las sospechas de los investigadores
apuntan a que fueron dos los delincuentes que cometieron el asalto
mortal, aunque no descartan que participó un tercero que conducía
un vehículo de apoyo.
El hecho sucedió a las 21.25 del viernes pasado en una vivienda
ubicada en Güemes 641 de la localidad de Hurlingham, en la zona
oeste del conurbano, donde Pasti se disponía a ingresar y fue
interceptado por dos delincuentes armados que lo amenazaron con fines
de robo.
Los ladrones esperaron que el hombre atravesara la reja de acceso
a su casa, donde hay un pequeño jardín, y luego lo empujaron
hacia adentro y le ordenaron que abriera la puerta de la vivienda.
La maniobra fue advertida por el vecino Fente, quien en ese momento
guardaba su camión en un garage donde funciona un taller mecánico
de su hermano y que está ubicado al lado, en Güemes 653.
Fente tomó un revolver 32 que llevaba encima y fue hasta la
vivienda de Pasti para amedrentar a los ladrones.
Sin embargo, cuando los asaltantes lo vieron entrar a la casa, comenzaron
a dispararle y lograron matarlo. |