Mar del Plata (NA) > Un
buque sísmico contratado por la empresa estatal Enarsa saldrá
estos días a recabar información en aguas profundas del
mar Argentino, en una superficie geológica similar a la que en
Brasil se descubrió una gigantesca reserva petrolera.
Así lo afirmó el ministro de Planificación Federal,
Julio De Vido, quien recorrió esta semana el buque en el que
Enarsa buscará confeccionar una base de datos actualizada para
evaluar la posibilidad de nuevas reservas petroleras y atraer las inversiones
necesarias para su explotación.
Si bien De Vido no aseguró que haya reservas petrolíferas
en la zona que se comenzará a explorar, destacó que «es
similar a la de Brasil» con lo cual se espera que así sea.
Lo importante de seguir los pasos de Brasil es que después de
casi 20 años la Argentina sale nuevamente a aguas profundas a
buscar información.
Los datos con los que se cuentan actualmente datan de la década
del 70 y eso es lo que impide que muchas petroleras o empresas privadas
decidan realizar inversiones en aguas argentinas.
Salir a recabar la información requirió de una inversión
de 30 millones de dólares, que Enarsa tiene previsto recuperar
al vender esos datos a potenciales explotadores de las reservas, aunque
permanecería en sus manos la propiedad de las mismas.
El titular de Enarsa, Exequiel Espinosa, comentó las distintas
operaciones que se vienen realizando en aguas argentinas, durante la
recorrida por el buque que iniciará un viaje que por unos seis
meses lo tendrá en aguas profundas buscando nuevas reservas.
Desde Buenos Aires hasta Tierra del Fuego, Enarsa, en forma conjunta
con otras petroleras, tiene 12 cuencas no productivas costa afuera en
el mar, en las que hay 184 pozos de exploración.
Si bien Espinosa subrayó que a la Argentina «le ha faltado
continuidad como la que tuvo Brasil que hace más de 25 años
viene buscando nuevas reservas», también destacó
que «se ha avanzado mucho en ese camino en los últimos
años».
Esperanzas
Lo importante de la zona es que tiene un talud continental que se
formó en la era en que los continentes de África y América
se dividieron, y que tanto en una como en otra costa hay importantes
reservas petroleras ya descubiertas.
La falta de investigación en costas argentinas es la que ha
impedido que el país detecte reservas importantes como las
de Brasil o Angola, dijo.
«El talud tiene todo el potencial», destacó Espinosa,
al tiempo que precisó que se explorará un total de 220.000
kilómetros costas afuera, con lo cual se trata de un «proyecto
de exploración de alto riesgo».
El proyecto puso de relieve ese dato para salir a investigar y buscar
la información necesaria que permita, a 25.000 metros de profundidad,
detectar por ondas sísmicas los movimientos de la tierra submarítima
y detectar posibles reservas.
Llegará el momento entonces de instalar plataformas off shore
y de realizar los pozos, pero esa parte del negocio se espera completar
cuando la información lo permita.
Por ahora, el buque saldrá con seis caños de aire en
popa que una vez sumergidos emitirán ondas sonoras muy leves
que serán captadas por un hidrófono y que se computarizarán
en la base de datos y se recopilarán en Enarsa.
La estatal tendrá poder como mínimo sobre el 51 por
ciento de la información recogida, mientras que la empresa
contratista GXT tendrá el porcentaje restante.
De esta manera, el Estado se asegura tener mayoría y poder
de voto y veto en caso de ser necesario a la hora de licitar la venta
de esa información y de explotación de reservas.
Actualmente, 11 áreas ya cuentan con la información
necesaria para salir a licitar explotaciones y, según anticipó
De Vido, esto sucederá muy pronto.
«Tenemos todo el proceso de exploración de información
en marcha y no se va a detener hasta que no esté explorado
todo el Mar Argentino», aseguró el ministro. |