Por su parte, la Cámara de Comercio
cuestionó la decisión de los ediles y dijo que “en
estos casos hay que priorizar la salud de la gente».
Centenario/Neuquén > El intendente de esta ciudad,
Adrián Cerda, afirmó ayer que dará marcha atrás
con la polémica modificación de la ordenanza que habilita
a los kioscos a vender bebidas alcohólicas las 24 horas.
El jefe comunal sostuvo que “no tuve reunión previa con el
bloque del Movimiento Popular Neuquino (MPN), sino hubiésemos
charlado y debatido un poco. La verdad me toma de sorpresa pero ya he
tomado la decisión política de vetar esta norma”.
La norma aún no ingresó al Ejecutivo y Cerda tendrá
un plazo de 10 días para anular las modificaciones que los concejales
hicieron a la ordenanza 2134/95, la cual regula el expendio y la venta
de bebidas alcohólicas en la ciudad.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio, Guillermo
Cimolai, cuestionó la modificación de la norma y sostuvo
que “más allá del comercio del alcohol se debe priorizar
la salud de la gente”.
Además, expresó que “no existen los controles por
parte del Estado. Si las cosas anduvieran bien, la restricción
no existiría. Pero lamentablemente hay que restringir la venta
porque los controles están ausentes”.
La polémica se desencadenó el pasado jueves, cuando el
bloque del MPN propuso la modificación del artículo 5º
de la ordenanza 2134/95. Sin ese articulado, el expendio y la venta
de alcohol a mayores de edad es “a toda hora”.
¿Libertad de los mayores?
El justificativo –según los considerando de la ordenanza-
radica en “que se coartaba la libertad a los mayores” a
acceder a las bebidas alcohólicas “teniendo en cuenta que
un mayor es responsable de sus actos”.
Es que la ordenanza indicaba que sólo los mayores de edad podían
acceder a las bebidas, únicamente en el horario de 8 a 23. Según
los argumentos, los mayores no podían disponer de su libertad
como “seres responsables”.
Pero las legislaciones nacionales van más allá de las
libertades individuales, y buscan –a través del bien común-
la prevención del alcoholismo y pugnar por una vida sana en estos
tiempos modernos que vive la sociedad.
“Derogar el artículo quinto de la ordenanza que está
vigente es hacer un retroceso, por lo tanto como intendente municipal
y en representación del Ejecutivo voy a estar vetando la norma
que todavía no ingresó el Ejecutivo”, dijo el jefe
comunal.
Cerda también explicó que tomó la decisión
de vetar la ordenanza porque “entiendo que ese es el espíritu
de los concejales del nuevo cuerpo deliberativo”, alo que destacó:
“Habrá que trabajarla y readecuarla a la situación
que vivimos”.
Vale señalar que el edil radical Daniel Egea –quien pertenece
a la nueva gestión del intendente electo Javier Bertoldi- aseguró
más allá del veto, los ediles modificarán la ordenanza
después de 10 de diciembre.
Escenario
¿Más descontrol nocturno?
A esta
altura, el eje del debate se centra en saber cuáles serán
las consecuencias que tendrá la venta de alcohol.
Centenario > A favor o en contra de las restricciones.
A esta altura, el eje del debate radica en las consecuencias que tendrá
la limitación en la venta del alcohol, y si cambiará
en algo la «descontrolada» noche de Centenario.
Es sabido que las constantes peleas entre jóvenes por el abuso
del alcohol, están en todo el país. Sin embargo, la
mayoría de las legislaciones intentan poner un coto a esta
historia violenta, que se repite casi todo los fines de semana.
El argumento de los ediles no fue «malintencionado», según
expresaron algunos de ellos a La Mañana de Neuquén.
Pero no tomaron la dimensión legislativa de una norma que es
retrograda y no está dentro de los cánones de una sociedad
moderna.
La libertad de los mayores como «seres responsable», como
justificativo para levantar la restricción horaria en la venta
de alcohol, caen en saco roto por la misma realidad: son los mismos
comerciantes los que aseguran que los controles no son estrictos,
y como consecuencia la venta de alcohol en horas de la noche, caerá
indefectiblemente en los menores.
El ex concejal por el MPN Lorenzo Lorente fue uno de los autores de
la ordenanza 2134/95 que fue modificada la semana pasada por los ediles.
«Lamentablemente no tuvieron la dimensión de los que
hicieron», dijo.
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