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Se designó al ex gobernador
de Salta, Juan Carlos Romero como
presidente del Senado.
Buenos
Aires (Télam) > Los senadores nacionales electos
en los comicios del 28 de octubre juraron ayer y se incorporarán
a partir del 10 de diciembre, en una cámara donde el kirchnerismo
tendrá una contundente mayoría que le permitirá
tener cerca de los dos tercios de los votos de ese cuerpo.
Los senadores juraron en una sesión preparatoria en cuyo transcurso
se designó al ex gobernador de Salta, Juan Carlos Romero como
presidente, y al radical Juan Carlos Marino como vicepresidente primero
del cuerpo, en reemplazo de Marcelo López Arias y Miriam Curletti,
respectivamente.
El bonaerense José Pampuro conservara la presidencia provisional
del Senado, y el sanjuanino Roberto Basualdo la vicepresidencia segunda
hasta febrero, cuando se eligen las autoridades del Senado.
La ceremonia fue conducida por el vicepresidente de loa Nación,
Daniel Scioli, que tomó juramento a los 24 senadores electos,
entre los que se encontraban dos legisladores que fueron reelectos,
dos gobernadores y un ministro de la Nación.
Scioli les tomó juramento a los senadores electos por la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires y por las provincias de Salta, Chaco,
Río Negro, Tierra del Fuego, Neuquén, Santiago del Estero
y Entre Ríos.
De esos 24 legisladores, 12 responderán al Frente para la Victoria,
dos son radicales no concertadores, cuatro ingresarán por la
Coalición Cívica, uno por el Movimiento Popular Neuquino
y el resto pertenecen a partidos provinciales que responden al kirchnerismo
o son radicales kirchneristas.
La ceremonia se realizó luego de la sesión en la que
la presidenta electa, Cristina Fernández de Kirchner, formalizó
su renuncia a la banca para asumir el Poder Ejecutivo Nacional a partir
del 10 de diciembre.
Luego de que el pleno le aceptó la dimisión, se le tomó
juramento a quien la reemplazará desde esa fecha y hasta 2011,
el ex embajador en Francia, Eric Calcagno.
Los neuquinos
Posteriormente, la ceremonia continuó con la jura del neuquino
kirchnerista Marcelo Fuentes, actual funcionario de la Cancillería,
y Nancy Parrilli y el representante por la minoría del Movimiento
Popular Neuquino, Horacio Lores.
La ceremonia que duró exactamente 30 minutos, fue seguida desde
el recinto por algunos funcionarios nacionales, como el secretario
general de la Presidencia, Oscar Parrilli; el secretario de Medios
de la Nación, José Albistur.
Además, estaban el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo
Zamora; y los electos de Neuquén, Jorge Sapag; y de Tierra
del Fuego, la dirigente del ARI, Fabiana Ríos.
También logró instalarse en los pasillos de las bancas
la dirigente de la Coalición Cívica, Patricia Bullrich.
La toma de la jura continuó con los representantes de Chaco,
entre los que se contó al actual gobernador Roy Nikisch; los
rionegrinos, con el reelecto Miguel Angel Pichetto a la cabeza; y
los salteños, entre los que se destacaba el mencionado Romero.
Los que más aplausos se llevaron desde las gradas fueron Pichetto,
Romero, el actual ministro de Educación de la Nación,
Daniel Filmus; la kirchnerista entrerriana Blanca Osuna; y el destituido
gobernador radical concertador Jorge Colazo, el último que
juró y que fue recibido desde las gradas con un «aguante
Colazo».
Durante la ceremonia se pudo observar claramente la distancia que
separa a los radicales «k» del resto de sus pares de la
UCR.
Mientras Roy Nikisch y el entrerriano Arturo Vera se ubicaron en las
bancas que pertenecen al bloque de la UCR, el rionegrino Verani se
mantuvo lejos y en ningún momento, al igual que Colazo o el
santiagueño Emilio Rached, se saludó con el titular
del partido, Gerardo Morales.
Si bien las bancas serán otorgadas formalmente desde el 12
de diciembre, en la que será la primera sesión con la
nueva conformación de la Cámara, hubo hoy algunas curiosidades
en la ubicación de los futuros senadores.
Además, en la banca de Cristina Fernández se sentó
la chaqueña kirchnerista Elena Corregido. Filmus se ubicó
entre la mendocina Marita Perceval y el sanjuanino César Gioja.
Finalmente, la porteña María Eugenia Estenssoro, sentada
al lado de su compañero de fórmula, el filósofo
Samuel Cabanchik, se ubicó en la primera fila, a la izquierda
de la Presidencia, en la banca que habitualmente utiliza Carlos Menem.
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