El uranio, el doble de caro

Neuquén > Por el aumento de los precios internacionales del mineral, desde Nucleoeléctrica Argentina (Nasa) aseguran que en 2007 adquirir las 120 toneladas de uranio que utilizarán Atucha I y Embalse demandará más de 100 millones de pesos; el doble que el año pasado, informó en su última edición El Inversor Energético.
En 1998, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) decidió dejar de producir el uranio concentrado que consumen las dos centrales nucleares del país, Atucha I y Embalse, y comenzó a importarlo.
La razón fue puramente económica: en ese entonces la libra (que equivale a 453 gramos) del mineral en el mercado internacional costaba 9 dólares (en 2001 tocó su mínimo histórico con 6 dólares), mientras que explotarla internamente costaba cerca de 13 dólares.
La ecuación cerraba a favor de la CNEA, que al comprar el recurso en el extranjero ahorraba un 35%. Sin embargo, en los últimos cinco años una serie de factores provocaron un shock en el precio del uranio, que ahora ronda en los 95 dólares por libra.
«Entre ellos se destaca el vertiginoso incremento de la demanda mundial como resultado de la incorporación de nuevos actores al mercado, principalmente India, China (que se lanzó a construir dos centrales nucleares por año) y EE.UU., que después de tres décadas reactivó su plan atómico y planea instalar 50 nuevos reactores de aquí a 2050», señala El Inversor Energético.
Y agrega que también influyó el retraimiento temporal de la oferta como consecuencia de la inundación de la mina más grande de uranio en Canadá, el principal proveedor del planeta.
De acuerdo a cálculos de Nasa, este año la importación del mineral para las centrales atómicas demandará una erogación de 108 millones de pesos; más del doble que en 2006, cuando se desembolsaron cerca de 40 millones.
El número surge de multiplicar las 120 toneladas de uranio que consumen las plantas por año (Embalse requiere 70 y Atucha I 50) por u$s 300, que según los números ofrecidos por el departamento de Suministro de la CNEA es lo que costaba durante el primer semestre poner en el país cada kilogramo del recurso. Esa cifra podría bajar debido a la caída de los precios internacionales, si bien la Argentina tiene contratos sucriptos con anterioridad.
Según las proyecciones oficiales, las centrales Atucha I, Embalse y Atucha II (cuando entre en funcionamiento, previsto para 2010) necesitarán cerca de 7.500 toneladas del mineral a lo largo de su vida útil, sin contar los consumos de reactores de investigación y equipos de medicina.
Frente a ese escenario, desde la CNEA vienen advirtiendo desde hace tiempo que es indispensable reactivar la producción de uranio en el país, ya que el precio no bajará en el corto plazo. Por el contrario, desde noviembre de 2006 a mayo de este año se ha duplicado: de 64 dólares por libra pasó a los 123 de la actualidad.