| Se prevé que este año
se inseminarán 2.626 vientres de 150 productores, la mayoría
en el Norte Neuquén > El plan
de inseminación artificial para el ganado bovino que se aplicó
en la provincia de Neuquén tuvo efectos directos e indirectos
beneficiosos para el negocio ganadero en manos de los pequeños
ganaderos.
Un informe de la dirección de Ganadería indicó
que si bien el objetivo principal del plan es la mejora genética
de los rodeos, resultó interesante observar cambios en el manejo.
Se apuntó que la mayoría de los productores participantes
adoptó un plan sanitario, todos los productores en forma individual
o asociada incorporaron mejoras en sus campos como corrales y mangas
y en muchos casos construidos con materiales de la zona.
La dependencia que dirige Horacio Pessolani observó que la
mayoría de los productores comenzó con alguna práctica
de estacionamiento en los servicios y varios adquirieron toros, a
través del proyecto Toro Neuquino, para realizar los servicios
de repaso de la inseminación artificial con genética
del mismo valor aportada por el mecanismo. También se determinó
que muchos productores solicitaron asistencia técnica para
desarrollar planes de mejoramiento de sus pasturas.
En el año 2005 intervinieron 40 productores que inserminaron
unas 900 vacas y vaquillonas, actividad que estuvo focalizada en el
Centro, Este y Norte de la provincia. El año pasado la cantidad
de productores aumentó a 88, se inseminaron 1.100 vientres
y se amplió la cobertura a la zona Sur de la provincia y a
varias localidades del Norte.
Para este año, el pronóstico del organismo prevé
llegar a 150 productores, chicos y medianos, e inseminar 2.626 vientres
bovinos.
Feed lot
Pessolani destacó que el proyecto de inseminación está
estrechamente ligado con el de engorde de ganado bovino. Se pretende
-indicó- que los pequeños productores puedan continuar
involucrándose para lo que deben necesariamente producir terneros
de una calidad genética que les permita engordar en tiempo
y forma de manera de hacer rentable la actividad.
El objetivo final de este esquema es que los pequeños productores
puedan ir transformándose en productores de terneros que luego
sean destinados a su engorde en sistemas intensivos. La consecuencia
de este objetivo es que se liberan áreas de campo de invernada
que pueden ser eventualmente ocupados por más vientres y ejerciendo,
a la vez, menor presión de pastoreo sobre el sistema natural.
Se recordó que el proyecto está destinado exclusivamente
a pequeños productores, que la Asociación Argentina
de Criadores de Hereford dona la totalidad del semen utilizado, el
cual proviene de sus mejores cabañas asociadas y que el costo
de materiales, insumos y gastos operativos los aporta el Ministerio
de Producción a través del fondo ganadero provincial.
El costo por cada animal es de $ 25. |
