Por Ángel Castillo
Un agitado comienzo de la Convención Constituyente donde la
intolerancia pareció ser la invitada de honor, la advertencia
sobre el uso de los subsidios al desempleo y el mayor precio del gas
que se importa y se exporta más barato, fueron los temas más
relevantes de la semana.
Los convencionales de la oposición reflejaron en el recinto
de la Legislatura un nivel de intolerancia pocas veces visto en la
historia democrática de la provincia.
Una discusión estéril por las formas con la pretensión
de imponer los temas de fondo para modificar la Constitución
provincial desde un sitial minoritario se convirtió en un triste
y bochornoso episodio que se complementó con una movilización
orquestada por dirigentes gremiales que hasta paralizó y llegó
a generar temor en el Bajo neuquino.
Luego de que se llegó a un acuerdo donde nominalmente se votaron
las autoridades provisorias entre dos dúos propuestos y en
las que se impuso el MPN, la oposición se retiró a un
local partidario a dar una conferencia de prensa donde expuso sus
cuestionamientos sobre la actitud de la mayoría.
Sobisch, tras asumir como presidente del cuerpo colegiado, dio un
discurso contemporizador y puso de ejemplo la actitud que tuvo y que
tiene hasta en los momentos más difíciles el silencio.
De allí que convocó a una nueva sesión para el
lunes a las 9 en el recinto del Concejo Deliberante, donde se dará
una nueva oportunidad para que juren aquellos que no lo hicieron el
viernes.
Hay un discurso opositor que se abroqueló tras el no a la reforma
de Unión de los Neuquinos aunque el resto de los partidos que
lo acompañan hizo campaña para una reforma más
acotada, de la que ahora son renuentes. La discusión sobre
las formalidades quedará en lo anecdótico.
Apuesta a la producción
Mientras se inauguraba una planta de empaque de cerezas, fruta fina
que tiene precios atractivos en el mercado externo, y Neuquén
está incrementando su producción en forma geométrica,
se dejó flotando una advertencia. El año que viene se
necesitarán unos 2.000 obreros para llevar adelante un plan
de obras públicas, pero los puestos de trabajo no se pueden
cubrir con los neuquinos.
Es que habiendo más de 40 mil subsidios por desempleo parece
una afirmación errática.
El gobernador Sobisch se encargó de aclarar las razones. Culpó
a los políticos que prefieren dar planes jefes de hogar para
que los beneficiados se queden «tomando mate « en sus
domicilios para después «llevarlos como vacas»
a votar.
También dijo que hay empresarios que le dan empleo a quienes
reciben subsidios pero les dicen que no dejen de recibirlos, con lo
que generan empleo en negro.
Además, adelantó que se está depurando el padrón
provincial de subsidios y entre las «sorpresas» que se
tuvo es que hay desocupados de otras provincias «que gastan
el pasaje en colectivo y vienen a cobrar todos los meses». La
advertencia quedó flotando minutos antes de inaugurar una planta
de primer nivel que da empleo genuino a 70 personas y empaca fruta
de un centenar de productores.
El gas neuquino
La errática política energética nacional quedó
al descubierto con las declaraciones de los dos candidatos favoritos
a la presidencia de Bolivia, Evo Morales y Jorge Quiroga. Ambos adelantaron
que, en caso de ganar la presidencia, lo primero que harán
es aumentar el precio del gas que le venden a la Argentina.
Le venden a 2,08 dólares el millón de BTU, mientras
que a Chile, Argentina le vende a 1,75 dólar, y a la cuenca
neuquina se le cotiza, la misma medida, a 0,70 dólar.
El presidente Néstor Kirchner no ha dado muestras de volver
atrás en su política atendiendo a las propuestas que
hizo la mayor provincia productora de gas que es Neuquén, donde
se evidencia una cuestión política más que económica.
En Chile ya hay preocupación porque se prevé que los
recortes de gas de Argentina van a comenzar en enero en lugar de febrero,
como fue este año, por la recuperación económica
que ha tenido Argentina que hará incrementar el uso de este
combustible. Parece un contrasentido que se apueste a un gasoducto
de 5.000 kilómetros desde Venezuela donde sólo el costo
de traslado de un millón de BTU será de 12 dólares.
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