El principal interrogante tanto para
el Laborismo como para la oposición es qué postura adoptará
el nuevo premier con respecto a Irak.
Londres (Télam)
> El laborista Gordon Brown fue designado primer ministro
británico y prometió «un nuevo gobierno con nuevas
prioridades», poco después de una emotiva renuncia de
Tony Blair tras diez años en el poder y en el cierre de una
era política y el inicio de otra en el Reino Unido.
Con una sonrisa que parecía no entrar en su rostro, Brown,
un escocés de 56 años que hasta ayer fue ministro de
Finanzas, abandonó el Palacio de Buckingham, en el centro de
Londres, luego de mantener una reunión privada de 55 minutos
con la reina Isabel II en la que la soberana le encargó formar
un nuevo gobierno.
En sus primeras declaraciones como premier designado, Brown -quien
recibe de Blair el difícil legado de la impopular guerra en
Irak- prometió liderar «un nuevo gobierno con nuevas
prioridades».
«Tengo el privilegio de tener la gran oportunidad de servir
a mi país. Ahora que empiece el trabajo por el cambio»,
declaró al llegar a la residencia oficial de los jefes de gobierno,
en el número 10 de la calle Downing Street.
Fruto de una larga espera
Para Brown, quien desde hace diez años dirige la economía
del país como ministro de Finanzas de Blair, la jornada constituye
la coronación de una larga y frustrante espera de 13 años
por asumir la jefatura de gobierno de Blair, su compañero pero
también su rival político en el laborismo.
El período de prosperidad económica sin precedente de
la gestión de Brown, su devoción por la disciplina fiscal
y su promesa de aumentar la ayuda para África son las principales
credenciales de este poco mediático político escocés
de 56 años.
Pero hay interrogantes sobre qué hará con la impopular
presencia militar en Irak, el legado más «caliente».
Brown ya ha manifestado su interés en reducir el número
de tropas en ese país, pero una decisión en ese sentido
podría resentir las relaciones con Estados Unidos, un factor
que el nuevo premier deberá contemplar.
El laborismo espera que la llegada de Brown al poder revitalice al
desgastado partido tras más de un año de encuestas desfavorables
frente a la oposición conservadora, en parte gracias al descontento
con Irak.
Acuerdo secreto
Brown y Blair fueron elegidos para el Parlamento en 1983, y desde
entonces ascendieron rápidamente dentro del partido.
Se afirma en toda Gran Bretaña, aunque nunca se confirmó
oficialmente, que ambos acordaron secretamente en 1994 que si Blair
se convertía en premier, como hizo en 1997, renunciaría
a mitad de mandato para cederle lugar a Brown, algo que no hizo y
que cumplió recién ayer.
Blair no se arrepiente de Irak
El ex
primer Ministro dijo que lamenta el sufrimiento de los soldados en
Irak y Afganistán, pero no se arrepiente de las invasiones.
Londres (Dpa y Télam) > Tony Blair, que
será nombrado enviado especial del Cuarteto para Cercano Oriente
tras su renuncia como primer ministro británico, destacó
su apoyo a una «solución de dos Estados» en la
región en conflicto y aseguró que no se arrepiente de
haber apoyado a Estados Unidos en los conflictos en Afganistán
e Irak.
Antes de presentar su renuncia, fue preguntado por los motivos por
los que aceptaría el cargo de enviado especial del Cuarteto.
«La absoluta prioridad es intentar dar efecto al consenso que
existe hoy en día en la comunidad internacional de que la única
manera de dar estabilidad y lograr la paz en Cercano Oriente es la
solución que contempla dos Estados», dijo, y luego agregó:
«Ello significa un Estado de Israel seguro y un Estado palestino
que sea viable en términos de instituciones».
En relación a los conflictos bélicos en los que está
involucrado su país, si bien dijo que lamentaba los peligros
que enfrentan las tropas británicas en Irak y Afganistán,
aseguró que no se arrepentía de su apoyo a Bush en esas
dos guerras.
Respaldo estadounidense
Washington (AFP/ NA) > El presidente de Estados
Unidos, George W. Bush, tuvo una «relación extraordinaria»
con el primer ministro británico Tony Blair y contribuirá
a la llegada al poder de su sucesor Gordon Brown, dijo ayer la Casa
Blanca con motivo de la asunción del ex ministro de Finanzas
como premier. «Tony Blair ha sido un amigo estrecho, un aliado,
un socio y un asesor para el presidente» Bush, añadió.
«Sí, podemos decir que sí», respondió
Snow a la prensa al ser interrogado si Bush tenía la intención
de tender la mano a Brown como Blair lo había hecho con el
presidente estadounidense. |