El alza estuvo motivada fundamentalmente
por la suba de los precios de exportación.
Buenos Aires (Télam) > Las exportaciones energéticas
argentinas crecieron 7 por ciento en los primeros 10 meses de este año
comparadas con las del año anterior y llegaron a 6.265 millones
de dólares, según el informe económico semanal
de Investigaciones Económicas Sectoriales (IES).
Este avance en las ventas energéticas al exterior se motivó
en un alza en los precios medios de exportación del 18%, que
compensó la caída del 2% en volumen, explicó el
informe de la consultora.
Las cantidades exportadas de petróleo sufrieron en los primeros
diez meses una merma del 30,7%, parcialmente compensada por un alza
del 7% en las exportaciones de gas natural, debido a una mayor disponibilidad
estacional del fluido.
En el caso de los carburantes, se contrajeron las exportaciones en cantidades
de naftas (15%) y de gas oil (54%), debido al incremento en la demanda
interna y a la reducida capacidad disponible, compensadas parcialmente
por las mayores exportaciones de fueloil.
Importaciones
En cuanto a las importaciones, treparon a 1.536 millones de dólares,
un 16% por encima de los primeros diez meses de 2005, debido a las
mayores importaciones de fuel oil (65% en volúmenes, para atender
a las centrales eléctricas) y de gas natural (7%), compensadas
en parte por las menores importaciones de petróleo y de gasoil,
entre los principales rubros de importación.
El informe indica que durante los primeros nueve meses de 2006 la
evolución de los tres segmentos del sector energético
-electricidad, gas y petróleo- ha mostrado sensibles disparidades.
La producción de energía eléctrica trepó
un 7% en relación con iguales meses de 2005, en tanto que la
de gas natural lo hizo en un 0,4%, en un marco de práctica
estabilidad y mostrando un retroceso respecto del primer semestre.
A su vez, la producción de energía eléctrica
se ubica en un 1,5% por debajo de iguales meses de 2004.
Por su parte, la producción de petróleo continuó
en un sendero decreciente, al caer un 1,6%, según el informe
del IES.
En cuanto a la demanda de los diferentes segmentos energéticos,
el consumo aparente de electricidad creció en un 5,8% en los
primeros nueve meses, y mantuvo una evolución ligeramente menor
a la de la producción.
Distinto fue el caso del gas natural, que presentó un consumo
aparente estimado en un 0,6% por debajo del mismo período del
año previo, por lo que mantuvo el panorama respecto del primer
semestre debido al menor consumo en las centrales térmicas
y en el GNC.
La mayor disponibilidad de gas producido respecto del consumo, por
razones estacionales, posibilitó el incremento de las exportaciones
a Chile.
Petróleo
Finalmente, el consumo aparente de petróleo creció 9,5%
en los meses de enero a setiembre, debido al aumento en la actividad
de las refinadoras (5,8%), en línea con el crecimiento en el
consumo de combustibles líquidos (6,7% de suba en las ventas),
concentrado en la nafta especial y, en menor medida, en el gasoil.
Emergencia por tres años más
Buenos Aires (NA) > La Argentina transita por
una situación de «emergencia energética»
que se mantendrá «al menos por dos o tres años
más», a pesar de que las inversiones previstas para el
sector resulten exitosas», advirtió hoy la consultora
Investigaciones Económicas Sectoriales (IES).
De acuerdo con el informe que semanalmente distribuye esa entidad,
las expectativas para el sector energético nacional «se
mantienen inciertas».
Aunque aclaró que «aparecieron algunas señales
positivas vinculadas con la adjudicación del equipamiento para
las centrales eléctricas y la financiación para las
obras de transporte eléctrico».
Inversiones
Añadió que en el segmento petrolífero, si bien
se anunciaron inversiones, los capitales «están destinados
a optimizar la explotación de pozos existentes y solo en escasa
medida a nuevos pozos».
IES recordó que entre enero y setiembre de este año,
la producción de energía eléctrica trepó
7 por ciento con relación a igual período de 2005, en
tanto que la de gas natural lo hizo en un apenas 0,4 por ciento, «en
un marco de práctica estabilidad».
Por su parte, indicó que la producción de petróleo
«sigue inmersa en un sendero decreciente, al caer un 1,6 por
ciento (en el período de análisis), y continúa
con la tendencia depresiva de los últimos seis años». |