El flagelo se vive en capital y
en varias localidades de la provincia. Hace falta trabajar con el
conjunto de la sociedad.
Neuquén > La provincia convive desde hace
diez años con un problema grave que necesita ser analizado
para encontrar la forma de controlarlo. Se trata del enorme número
de menores de 20 años que quedan embarazadas por problemas
diferentes. Las cifras indican que el 18 por ciento de los bebés
que nacen anualmente provienen de embarazos adolescentes. De ese número,
el 25 por ciento son madres que se encuentran entre los 10 y 15 años;
mientras que el 75 por ciento restante es para las madres cuyas edades
corresponden al grupo etáreo 16-19 años.
La mayoría se produce en la capital debido a la cantidad de
habitantes que recibe, pero también es importante remarcar
los altos números que sufren localidades vecinas tales como
San Martín de los Andes, Cutral Co, Aluminé y Chos Malal.
Es una situación que engloba al conjunto de la provincia.
“En la última década notamos que los embarazos
adolescentes no disminuyeron y observamos que de cada 100 niños
que nacieron vivos, entre 18 y 20 bebés son de mamás
menores de 20 años”, remarcó Mónica Opesi,
responsable del programa de Salud Sexual y Reproductiva de la subsecretaria
de Salud de la provincia.
Desde su función, Mónica Opesi expresó que Neuquén
está “por encima de la media nacional”, lo cual
no es bueno y hace repensar las funciones de cada organismo para comenzar
a trabajar seriamente en el tema. Y agregó que “necesitamos
trabajar más con la gente y organizaciones e inculcarles que
existe una ley que los ampara en la materia, permitiéndole
acceder a cualquier centro de salud y obligarlos a que se les entregue
los elementos anticonceptivos de manera gratuita”.
Trastornos futuros
Encontrarse con estos datos causa impacto, pero a la vez sirve para
darse cuenta que hace falta trabajar y mucho en materia de salud sexual
y reproductiva. “El embarazo en la adolescencia es un tema muy
importante porque acarrea graves consecuencias sociales, sobre todo,
en la madre”, reconoció la responsable del programa de
la Subsecretaría de Salud. Y agregó: “Nos encontramos
con la aparición abrupta de una maternidad y/o paternidad responsable
de personas que todavía no han terminado, en su mayoría,
el curso de los estudios primarios y/o secundarios”.
“La falta de conocimiento en el tema hace que las chicas jovencitas
tengan que salir, tempranamente a trabajar, que abandonen sus estudios,
y dejen de lado ciertas cosas importantes y necesarias de vivir a
esa edad. Habló precisamente de recitales, salidas nocturnas
y demás”, detalló Mónica Opesi.
Tarea de todos
La situación es muy compleja y no sólo le cabe responsabilidad
al área de salud. Para la encargada del programa provincial
de salud sexual y reproductiva, “todos debemos hacernos eco
de la situación y colaborar en partes pequeñas para
el conjunto de la problemática. Educación, los medios
de comunicación y, sobre todo, el entorno familiar, tienen
su cuota de responsabilidad”, enfatizó Opesi.
Y apuntó fuerte a la tarea que les toca a los padres manifestando
que “parece que son el gran ausente. Ellos son quienes más
deben charlar con los chicos sobre este tema”. “Es importante
que salud esté muy atenta con la distribución de los
preservativos y anticonceptivos; pero también que la familia
esté al tanto y hable del tema con sus hijos, porque el no
hablar es negar la realidad que viven sus hijos”, agregó.
La principal amenaza pasa por no dejar crecer el número que
se mantiene desde hace poco más de una década. Y el
desafío es reducir esos índices. Para eso, todos los
métodos apuntan a disminuir el embarazo en las adolescentes.
Opiniones del tema
«Esta problemática es una cuestión de toda la
sociedad. Nosotros desde el lado de salud; los chicos tomando consciencia
de la problemática; los padres -eje fundamental- hablando diariamente
con los chicos; las instituciones escolares adaptando el tema a la
currícula anual; y el Estado incluyendo acciones más
fuertes dentro del sistema de salud», expresó Mónica
Opesi.
«Todos tenemos nuestra culpa, porque nuestros hijos intentan
hablarnos del tema y nosotros damos por cantado que ellos son conscientes
de la problemática. Recién tomamos consciencia cuando
algo ha pasado», dijo María del Carmen Ortensi, madre.
«Muchos casos se dan en el marco de situaciones bajo una adrenalina
tal que llevan a hacer ciertas cosas sin pensar en los perjuicios
futuros», dijo Opesi.
«Debemos charlar más con todos los chicos, tanto en
marco de la escuela como también fuera de ella bajo el rol
de padres. Es clave mantener un diálogo permanente y abierto
con los adolescentes», Graciela Puchobskys.
Preocupación de los chicos
Las inquietudes de los jóvenes rondan sobre cuatro
temáticas: embarazo, masturbación, infecciones por transmisión
sexual y homosexualidad.
Neuquén> La responsable del programa de
salud sexual y reproductiva expresó que actualmente habría
que tener en cuenta las preocupaciones que manifiesta diariamente
la mayoría de los jóvenes, tanto varones como mujeres.
Por un lado, existen cuatro grandes problemas que los chicos preguntan
con persistencia sobre materia de salud sexual y reproductiva: el
embarazo; la masturbación, la infecciones de transmisión
sexual y el VIH-Sida; y por último, las diferentes orientaciones
sexuales que existen en la actualidad (diferentes formas de homosexualidad).
“El tema de la masturbación les preocupa y mucho. Eso
me llama verdaderamente la atención; hoy es una forma de satisfacción
propia», dijo Mónica Opesi.
Por otro lado, la doctora agregó que «la homosexualidad,
hoy por hoy, está vista bien por los jóvenes. Casi nadie
los mira como personas enfermas o diferentes”.
Información sin comprensión
Según la opinión de Opesi, los chicos contienen demasiada
información, pero no saben cómo agruparla. “Hoy
en día los chicos y chicas que concurren a la escuela tienen
abundante información, pero, en su mayoría, no saben
qué hacer con ella. Están bombardeados y no saben cómo
organizarla, cómo juntar todo en el momento indicado. Hay un
defasaje en la comprensión”.
Por último, mencionó que esto se comprueba fácilmente
cuando vemos que las chicas no saben qué les pasa al momento
de la menstruación. «Muchas veces tenemos casos donde
las jovencitas te dicen: ‘yo no sabía que al tener la
primera relación sexual, y habiendo menstruado, podía
quedar embarazada’. Este es un claro ejemplo de que no pueden
asociar ambas cosas. En esto hay que poner énfasis»,
concluyó.
Conociendo el Programa de Salud Sexual y Reproductiva
Funciona desde hace más de seis años. En la
actualidad luchan para conseguir implementar salud sexual dentro de
la currícula escolar.
Neuquén> El programa está en funcionamiento
desde el año 1999 y se implementa en toda la provincia desde
el hospital regional Castro Rendón hasta una centro de salud
o puesto sanitario con una enorme impronta intersectorial.
El mismo tiene varios subprogramas: el de prevención de VIH
sida y de las trasmisiones sexuales; búsqueda y detección
precoz de cáncer de cuello de Útero y de mamas; anticoncepción;
y Educación para la salud.
Además, tiene un fuerte énfasis, a diferencia del resto
de las provincias, en el trabajo intersectorial y se aplica, por ley,
en el área de acción social, en el Consejo provincial
de de la mujer y en el Consejo Provincial de Educación.
“Actualmente se está trabajando para introducir los contenidos
de educación sexual dentro de la currícula escolar,
lo cual sería la primera provincia en lograrlo”, adelantó
Mónica Opesi. Y agregó que es importante destacar el
aporte realizado por la Secretaría de Juventud y Deportes;
con las cárceles, con las ONG’s, con el ISSN, entre otros.
Por último, hay que remarcar que desde este programa se pone
énfasis en la entrega gratuita de todo tipo de anticonceptivos
(entre ellas pastillas orales, preservativos, dispositivo intrauterino,
el inyectable y el oral para el período de la lactancia). Y
después tiene vigente dos métodos atípicos en
el resto del país como es el de proveer la anticoncepción
de emergencia (la pastilla del día después) y la contracepción
quirúrgica (ligadura de trompas en las mujeres y la vasectomía
para los hombres).
Hablar de esta problemática
Neuquén > La salud sexual y reproductiva
se refiere al estado de bienestar físico, mental y social de
la persona en todo lo relativo al aparato genital y sus funciones.
Consiste en la posibilidad de llevar una vida sexual satisfactoria.
Por otra parte, va más allá de la planificación
familiar al considerar los distintos factores que determinan los comportamientos
sexuales, tales como las relaciones de poder entre los géneros
o el papel de las instituciones en las estrategias de reproducción.
La declaración de Buenos Aires sobre salud sexual y reproductiva
afirma que los programas de información destinados a mejorar
los niveles de salud de las mujeres y sus familias han quedado relegados
a pesar de que Argentina se ha comprometido mediante distintos acuerdos
internacionales a que todas las parejas tengan libre acceso a los
métodos anticonceptivos.
Algunos puntos importantes de esta declaración son:
- El derecho a la salud sexual y reproductiva como componente de la
salud general a lo largo de la vida.
- El derecho a adoptar decisiones con respecto a la procreación,
que incluye la elección voluntaria del cónyuge, la formación
de una familia y la determinación del número y espaciamiento
de los hijos.
- El derecho a condiciones de igualdad y equidad de varones y mujeres,
para el ejercicio de opciones libres de discriminación por
motivos de género.
De la misma manera, estos derechos se encuentran respaldados por el
artículo 75 de la Constitución Nacional que asegura
la protección de la madre durante el embarazo, así como
también condiciones de igualdad entre hombres y mujeres en
el acceso a servicios de atención médica.
Fuente: Página web del Instituto Social y Político
de la Mujer.
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