Por Laura E. Rotundo
Rosendo Fraga es el Director del Centro de Estudios para la Nueva
Mayoría. Como analista político, plantea en este reportaje
algunas cuestiones destacadas en relación a las próximas
elecciones legislativas.
A casi dos meses de los comicios previstos para octubre,
¿cómo observa actualmente el escenario de campaña?
Se trata de una campaña para una elección legislativa
que el presidente Néstor Kirchner la ha transformado en pre-presidencial.
La polarización en el ámbito nacional está entre
los dos sectores del Partido Justicialista, nacionalizándose
el conflicto de la Provincia de Buenos Aires.
Y es bastante agresiva...
Sí... en realidad, la campaña se pone cada vez más
agresiva, comenzando por el oficialismo y probablemente seguirá
de este modo.
¿Considera entonces que la interna del PJ continuará
intensificándose?
Sin dudas, la lucha interna del PJ continuará, así como
también seguirá dándose el duelo verbal entre
Cristina Kirchner e Hilda “Chiche” Duhalde.
El problema es que la campaña negativa tiene un nivel de recordación
de siete a uno respecto a la positiva.
Si un candidato ataca, critica, denuncia o insulta, la gente y los
medios lo recuerdan mucho más que si propone mejoras en la
educación y la salud.
Hoy es un problema universal en la política y no sólo
en la República Argentina.
Yendo al plano provincial y deteniéndonos en la Patagonia,
más puntualmente en Neuquén y Río Negro... ¿cómo
se encuentran hoy los sondeos para el oficialismo y para la oposición?
El problema del presidente Kirchner en todo el país es que
no logra transformar su popularidad en votos.
En la mayoría de los distritos, los candidatos de los gobernadores
volverán a imponerse.
Aún con la popularidad del Presidente, sus candidatos están
perdiendo hoy en Capital Federal y también en Santa Fe, pero,
como dije anteriormente, en la gran mayoría de los distritos
ganará el gobierno local.
La Patagonia no será la excepción, lo probable es que
en las cinco provincias patagónicas gane el gobierno local,
como sucederá en la mayor parte del país.
Desde algunos sectores, existen algunos rumores sobre la
intención de lanzar la postulación a presidente al ministro
de Economía, Roberto Lavagna, en 2007. ¿Cree que esto
podría concretarse? ¿Podría el jefe del Palacio
de Hacienda enfrentar a Néstor Kirchner, si es que éste
decide pelear por su reelección?
El ministro Lavagna es la figura delgGobierno con mejor imagen después
de Kirchner y su señora.
Alguna vez, Eduardo Duhalde lo mencionó como presidenciable.
La desarticulación del no-peronismo hace que, para 2007, la
oposición pueda surgir del mismo peronismo.
Si el ex presidente conserva poder en la provincia de Buenos Aires,
podría apoyar a Lavagna.
Recientemente, Chiche Duhalde dijo que iba a trabajar para que se
pudiera votar otro candidato a Presidente en la próxima elección
presidencial y ése podría ser Roberto Lavagna.
En general, ¿cuál es el partido político
que actualmente observa con más proyección a nivel nacional?
Sin lugar a dudas, el peronismo. En gran medida la elección
legislativa se ha transformado en una suerte de interna abierta del
PJ, por la atomización del no-peronismo, en gran parte debido
a la desarticulación de los radicales.
Según las estadísticas que arrojan las encuestas
que se realizan en Nueva Mayoría, ¿cuáles son
las principales exigencias que le efectúan los ciudadanos al
Gobierno o a quien finalmente venza estos comicios legislativos y
deba representar al pueblo en el Congreso Nacional?
Las prioridades de la gente están determinadas por sus urgencias
y ellas son la pobreza y el desempleo en primer lugar, luego la inseguridad
y después la corrupción.
Temas como la educación, la salud y la justicia son importantes,
pero ceden en prioridad frente a las urgencias.
Por último, quisiera hacerle una pregunta que suelo
formularla a todos los analistas políticos o historiadores
que entrevisto: ¿qué comentario le merece la afirmación
“en la República Argentina, no puede gobernar otro partido
que no sea el Justicialista»?
En los hechos, desde que surgió el peronismo, ningún
presidente no-peronista logró terminar su mandato.
Sólo Juan Domingo Perón y Carlos Saúl Menem lograron
finalizar sus gestiones en término.
Es la fuerza política que más tiempo ha gobernado la
Argentina desde los años cuarenta. Pero el largo período
de predominio peronista no ha sido un buen período para la
Argentina.
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