El cuidado de la piel en verano
Disfrutar del sol con responsabilidad

 
 
Las mujeres son las que
más horas se exponen al
sol del verano.
Más allá de las modas y de demostrar que uno estuvo de vacaciones, es necesario cuidar la piel de los rayos del sol. Los daños pueden ser irreversibles.


Disminuir tamañoAumentar tamañoCambiar tamaño  Imprimir Imprimir
 
       
   
   
 

Los profesionales de la salud señalan las prevenciones que hay que tener a la hora de ir a la playa.

Neuquén > Hay que decirlo, para muchos se trata de una práctica muy placentera. Cómodos en la reposera, bebida fresca en mano, con algo de música, y en soledad o en compañía, disfrutan de los rayos del sol.
Para otros, tomar sol es una práctica que se realiza para “verse mejor”, “para sentirse saludable y tener ese colorcito que todos envidian”. Sin embargo, tanto unos como otros deberían tener en cuenta los riegos que existen detrás de tomar sol. No para dejar de hacerlo, simplemente para disfrutarlo con responsabilidad.

La piel
La piel es una importante parte de nuestro organismo, que hay cuidar, no sólo por estética sino también por razones de salud. Es el órgano más extenso del cuerpo, y lo recubre en su totalidad. Además de actuar como escudo protector contra el calor, la luz, las lesiones y las infecciones, la piel también cumple las funciones de regular la temperatura corporal, almacena agua y grasa, es un órgano sensorial, evita la pérdida de agua, previene la entrada de bacterias.
Una adecuada exposición solar ayuda a la producción de vitamina D y al correcto desarrollo del esqueleto. Pero el exceso de sol no sólo puede provocar cáncer de piel, sino también otras alteraciones entre las que se destacan quemaduras, envejecimiento prematuro de la piel, afecciones oculares, insolaciones y golpes de calor.

Los rayos
Una parte de la luz solar está constituida por rayos ultravioletas, que son potencialmente peligrosos si no se toman las medidas adecuadas. El proceso es el siguiente: los rayos UV hacen que la melanina, un componente químico que se encuentra en la piel, reaccione. En consecuencia ésta se pone morena y si la exposición es incontrolada también sufre un deterioro. Los daños irreversibles en la piel pueden producirse en pocos minutos. Lamentablemente, aunque la gran mayoría de personas tiene aprendida bien la lección, y hasta puede repetirla de memoria, a la hora de llevarla a la práctica no tienen en cuenta las prevenciones y se exponen al sol sin protección alguna.
El efecto de los rayos ultravioletas sobre la piel es acumulativo, es decir, que el bronceado desaparece pero el daño persiste. Esta radiación es mayor entre las 10 de la mañana y las 16 de la tarde. A estas horas el nivel de radiaciones es mayor, más agresivo y cancerígeno.

Cáncer de piel
La mayoría de los cánceres de piel aparecen después de los 50 años, pero el daño comienza mucho antes. Por consiguiente, las medidas de protección para prevenir la posterior aparición del cáncer de la piel se deben tomar desde la niñez. La exposición al sol también causa el envejecimiento prematuro de la piel, que es diferente del envejecimiento cronológico.
Las personas que toman sol con regularidad muestran señales de esta condición a una edad muy temprana, a menudo antes de los 30 años.
El envejecimiento cronológico de la piel suele manifestarse después de los 40 años e incluso más tarde.

Pecas
La aparición de pecas y de arrugas finas, y la dilatación de los capilares suelen ser los primeros signos del proceso de envejecimiento por acción del sol. Con el paso de los años, la pigmentación de la piel envejecida por acción del sol suele volverse irregular.
La piel es parte del sistema natural de defensa del cuerpo. Muchos profesionales del cuidado de la salud creen, además, que la radiación ultravioleta puede alterar las funciones del sistema inmunológico. Los recién nacidos y los bebés menores de cinco meses no deben exponerse al sol. Hasta los tres años, deben hacerlo con mucho cuidado.
En el caso de los adultos, el factor de protector solar depende del color de la piel, pero debe oscilar entre 20 y 40, sí 20 y 40. Sobre todo, si estamos de paseo en la montaña. En la cordillera es natural que no se sienta el real efecto del sol sobre la piel, debido a las condiciones climáticas de la zona; no obstante, la radiación es superior cuando se está en el llano.
La exposición al sol en pieles normales se debe realizar aumentando 10 minutos de exposición cada día, desde el primero que no debe exceder los 15 minutos, evitando las horas del mediodía. A los 10 días la piel estará preparada para soportar el sol sin problemas, excepto los de acumulo de radiación solar.
Los factores de protección solar únicamente ofrecen un incremento en el tiempo de tolerancia a los rayos solares, pero no anulan, en general, los efectos del sol en su totalidad.

Para prevenir efectos negativos

Para prevenir los efectos negativos del sol es necesario ponerse crema con protección fuerte cada dos horas;
utilizar anteojos de sol,
Cubrirse la cabeza y evitar ponerse al sol entre las diez y las cuatro de la tarde.
También se aconseja no olvidar nunca que los rayos solares atraviesan las nubes, por lo que en días nublados también hay que tomar medidas preventivas.
Y utilizar cremas hidratantes después de sus baños de sol para aliviar la deshidratación.

 

 


La Mañana Neuquen
Redacción Cómo anunciar  |  Webmaster
Neuquen - Fotheringham 445 - Teléfono 449 0400
Copyright © 2002-2004 - La Mañana Neuquen - Todos los derechos reservados
 
 
 



Min.: 13°c
Máx.:
24°c
Cielo parcialmente nublado. Vientos moderados del sudoeste.
 
 

Energía
Productivo

 


Especiales La Mañana Neuquén

Visite La Mañana Cipolletti

Visite La Mañana Roca
 Transportes Interurbanos
 Guía Profesional
 Teléfonos de urgencia
 Farmacias de turno
 Transporte Aéreo
 Quiniela
 Horóscopo
 
 
 
 
 
 
 

Cine
Teatro
Recitales
Televisión
Videos

 
 

Revista Caras