El Tribunal de Penas recibió
a los dirigentes de Independiente, Cipolletti y Roca y a los presidentes
de las ligas de manera individual. Buenos Aires
> La cumbre de dirigentes del fútbol regional en
Buenos Aires por expreso pedido del Consejo Federal estuvo marcada
por las severas advertencias respecto a futuros episodios violentos
y la ausencia de Julio Arriaga, presidente de Cipolletti, pero no
arrojó conclusiones respecto al malogrado encuentro entre Independiente
y Cipolletti por la décima fecha del Torneo Argentino B.
Según coincidieron los dirigentes, el encuentro no tuvo características
de reunión, más que nada se trato de una declaración
testimonial para cada uno de los representantes presentes, que fueron
atendidos individualmente por los integrantes del Tribunal de Disciplina..
Por el club Independiente, estuvo presente el presidente de la entidad
roja, Gastón Sobisch, quien comentó que «primero
presenté el descargo correspondiente y después los miembros
del tribunal me hicieron las preguntas de rigor»
Pocas certezas y mucha incertidumbre
«Me consultaron por la cancha, por el operativo de seguridad
y por lo que pasó ese día, pero sobre el fallo del partido
en sí no se sabe nada, no me dieron niguna pista, y me retiré
algo intraquilo por eso» comentó Sobisch acerca de lo
que pueda pasar con el fallido partido de la décima fecha.
Ante la ausencia del presidente Julio Arriaga, que no habría
caído del todo bien, Cipolletti fue representado el titular
de la subcomisión de fútbol albinegra y Vicepresidente,
Horacio Pierdominichi, que contestó a las preguntas.
Su testimonio ante integrantes del órgano rector fue el último
del quinteto convocado. Hubo preguntas para el directivo y la proyección
de algunas pruebas fílmicas de lo sucedido en el estadio de
la capital neuquina.
«Del destino del partido no se sabe qué pasará.
Yo no me atrevo a pronosticar nada, aunque Sobisch (Gastón,
su par de Independiente) confía en una reprogramación»,
dijo Pierdominichi apenas salió del recinto.
Luis Sánchez, presidente de Lifune, se mostró más
escéptico que el mandamás del rojo y se atrevió
a inclinarse por una suspensión definitiva del encuentro (ver
aparte).
Los representantes de las instituciones afectadas por la suspensión
del encuentro fueron los últimos en cumplir con la requisitoria
de la máxima entidad del fútbol del interior.
La apertura de la jornada se produjo con Tomás Ibáñez,
presidente de la Liga Deportiva Confluencia; siguió con Juan
Carlos Ochionero, presidente del Deportivo Roca; y el presidente de
Lifune Luis Sánchez, quedó en el tercer lugar de la
nómina.
Ultimátum albinegro
Según el testimonio del propio Pierdominichi, la advertencia
a futuro fue contundente. «Se habló de una posible desafiliación
para nuestro club, que iría de siete a 14 días»,
expresó con preocupación.
«Según el informe del árbitro, Adrián Antillanca,
quien inició los incidentes fue la parcialidad visitante (Cipolletti),
pero ésto no queda corroborado en los videos», amplió
el responsable del fútbol local.
Los riesgos de Cipolletti se incrementan por los antecedentes inmediatos
que ya recibieron sanción. Los incidentes del encuentro entre
Deportivo Roca y Cipolletti correspondiente a la octava fecha ya tienen
fallo definitivo y el naranja deberá abonar 720 pesos en concepto
de entradas populares y el albinegro 900 de la misma moneda.
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