El sector, que generó trabajo
para más de 70.000 personas, pagó durante 2.005 siniestros
por 7.200 millones de pesos.
Neuquén >
“Este crecimiento nos permite contribuir cada día a la
protección del patrimonio, los ingresos y la vida de cada vez
más ciudadanos”, asegura Francisco Astelarra, presidente
de Asociación Argentina de Compañías de Seguros
(AACS), en nombre del Comité Asegurador Argentino, al celebrase
un nuevo Día del Seguro.
“El sector asegurador pagó durante 2005 un total de 1.238.000
siniestros por más de 7.200 millones de pesos, generó
trabajo en forma directa e indirecta para más de 70.000 personas
y pagó impuestos por más de 2.100 millones de pesos”,
indicó Astelarra, quien remarcó el incremento sostenido
de la actividad aseguradora, que registró una suba en su volumen
de primas por tercer año consecutivo.
Sin embargo, reiteró la preocupación de las aseguradoras
por el aumento de los siniestros de tránsito. “Son la
primera causa de muerte en personas de hasta 34 años; la cuarta
causa de muertes en el país; se pierden 148 años de
vida cada 10.000 habitantes y en el año 2005 la Argentina perdió,
por causa de dichos siniestros más de 600.000 años de
vida. Para resolver esta verdadera endemia social hace falta un profundo
cambio cultural tanto por parte de los ciudadanos, quienes deben cumplir
con las normas vigentes, como por parte del Estado, quien las debe
hacer cumplir y sancionar las infracciones”.
En tal sentido, Astelarra solicitó una mayor inversión
en infraestructura vial y el establecimiento de la educación
vial obligatoria.
Refiriéndose a la elevada presión impositiva que soporta
el sector, Astelarra pidió para la actividad aseguradora un
régimen acorde con los vigentes en otros países del
mundo, así como una mejora del diferimiento impositivo respecto
de los seguros de vida y retiro.
También expresó su preocupación por el aumento
del robo de automotores, luego de un período en el cual su
número se había estabilizado. “En el último
año el robo de autos creció un 9% y se observa una tendencia
creciente en los últimos meses”, afirmó.
En relación al sistema de riesgos del trabajo, Astelarra recordó
que este año cumplió 10 años de vigencia y destacó
como logro a nivel país una baja del orden del 40% en los índices
de fallecimientos.
De la mano del desarrollo
La primera
entidad aseguradora, “Compañía Argentina de Seguros
Marítimos S.A.”, se creó en 1.860.
Neuquén > Las empresas aseguradoras en
Argentina no tuvieron su nacimiento en las primeras décadas
del siglo XX sino que fue en pleno apogeo del Virreinato del Río
de la Plata cuando las primeras medidas tendientes a favorecer los
estudios económicos y comerciales vinculados a los seguros
permitieron el establecimiento de unas precarias pero incipientes
agencias. Su creación fue una consecuencia directa de la creación
de una Real Cédula, ocurrida el 30 de enero de 1974.
La Real Cédula fue elaborada por el Consulado Real de Buenos
Aires, quien nombró a Don Manuel Belgrano como secretario del
nuevo organismo. Dicha institución tenía por objeto
reforzar el campo de los seguros marítimos y terrestres por
el comercio existente con la Corona Española. De esta forma,
se crea el 7 de noviembre de 1796, a instancias Belgrano, la primera
compañía de seguros denominada “La Confianza”
Debido al auge y a la prosperidad del comercio en el Río de
la Plata, una vez producida la emancipación de la metrópoli,
se empezaron a asentar aseguradores extranjeros, particularmente de
Inglaterra.
A partir de la segunda mitad del siglo XIX, el crecimiento económico
y comercial de Argentina generó un considerable aumento de
la actividad aseguradora, lo que a su vez demandó la fijación
de normas que reglamentaron el sector.
En el año 1860, se constituye la primera entidad aseguradora
denominada “Compañía Argentina de Seguros Marítimos
S.A.”. Posteriormente, se constituyeron compañías
de origen nacional y extranjeras en nuestro país debido, básicamente,
al esquema agro exportador propulsado por la llamada “Generación
del 80”.
Recién en la primera mitad del siglo XX el Estado Nacional
da los primeros pasos para supervisar a todas las compañías
que se venían desenvolviendo en el país con la constitución
y creación de los organismos correspondientes.
Por ello, se resolvió crear un organismo especializado que
tiene por objeto el contralor de la actividad aseguradora que ya había
cobrado particular importancia. Mediante el Decreto Nº 108.295,
del 21 de Junio 1937, se crea la Superintendencia de Seguros de la
Nación.
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