| La foto se filtró misteriosamente
y el más perjudicado es el presidente Lula Da Silva.
Sao Paulo (dpa) > El coordinador de la campaña
a la reelección del presidente brasileño Luiz Inacio
Lula da Silva, Marco Aurelio García, acusó ayer a la
oposición de haber «estimulado» la filtración
de las fotos de las pilas de dinero decomisadas en poder de integrantes
del oficialista Partido de los Trabajadores (PT).
Esas imágenes, ampliamente difundidas desde este viernes por
la televisión y por los diarios brasilenos, podrían
perjudicar las posibilidades de que el presidente Lula logre hoy la
reelección en la primera vuelta de los comicios, y obligarlo
a disputar una segunda ronda, probablemente contra el socialdemócrata
Geraldo Alckmin. (ver aparte)
«Puedo asegurar que hubo incentivo», afirmó ayer
García, en una rueda de prensa concedida en Sao Paulo, en la
que agregó que el PT tiene «indicios» de que políticos
opositores otorgaron «apoyo material» (pagaron sobornos)
a un comisario federal para convencerlo a entregar las fotos a la
prensa.
Impugnación
Según el asesor, ese hecho será uno de los argumentos
que utilizará el PT para solicitar la impugnación de
la candidatura a la Presidencia de Geraldo Alckmin, bajo el argumento
de que el PSDB utilizó una maniobra irregular para perjudicar
la candidatura de Lula en vísperas de las elecciones.
García sostuvo que tiene pruebas de que el material llegó
a las manos de reporteros a través del comisario federal Edmílson
Bruno, el mismo que, el 15 de septiembre pasado, arrestó en
Sao Paulo a dos integrantes del PT con una suma equivalente a más
de 800.000 dólares, que sería utilizada para comprar
un «dossier» con acusaciones de corrupción contra
políticos opositores.
El escándalo del «dossiergate», que estalló
hace dos semanas, derivó en las renuncias o destituciones de
ocho personas vinculadas al PT, al gobierno o a la campana de reelección
de Lula, y al parecer perjudicó también el apoyo popular
a la candidatura presidencial.
Sondeo
Según un sondeo divulgado ayer por el Instituto Vox Populi,
a pocas horas de los comicios la ventaja de Lula sobre sus rivales
cayó a cuatro puntos porcentuales, aumentando las posibilidades
de que la disputa se defina en la segunda vuelta.
No obstante, según el analista político Fernando Rodrigues,
los asesores de Lula siguen confiados en que el presidente logrará
hoy una «victoria ajustada», pero suficiente para darle
un nuevo mandato en el gobierno, hasta 2010.
Esa confianza fue manifestada ayer por el vicepresidente José
Alencar, también candidato a la reelección en la fórmula
de Lula, quien sostuvo que la filtración de las fotos del dinero
decomisado con integrantes del PT es un acto de «desesperación»
de los políticos opositores que no afectará el resultado
de las urnas.
Lula, el mayor perjudicado
Sao Paulo (dpa) > A pocas horas de los comicios
generales en Brasil, la ventaja del presidente y candidato a reelección,
Luiz Inacio Lula da Silva, sobre sus rivales, cayó a cuatro
puntos porcentuales, aumentando las posibilidades de que la disputa
se defina en la segunda vuelta, según un sondeo divulgado ayer.
Datos del instituto privado Vox Populi revelaron además que
la intención de voto a favor del mandatario cayó de
51 a 46 por ciento.
La reducción del índice de preferencias obtenido por
Lula da Silva coincide con el recrudecimiento de la crisis desatada
a partir de que integrantes de su Partido de los Trabajadores (PT),
vinculados al gobierno y a su campaña política, fueron
denunciados por intentar comprar un «dossier» conteniendo
supuestas acusaciones contra candidatos opositores.
El segundo en intención de voto es el candidato por el Partido
de la Social Democracia Brasileña (PSDB), Geraldo Alckmin,
quien obtuvo el 33 por ciento de las preferencias, contra el 27 por
ciento del sondeo anterior.
La encuesta fue realizada entre el jueves y el viernes y entrevistó
a 2.000 electores en 192 municipios de todo el país. El margen
de error es de 2,2 puntos porcentuales para más o para menos.
Denuncian un sabotaje
Maceió (Brasil) (dpa) > El presidente
del Senado de Brasil, Renan Calheiros, solicitó ayer que se
investigue en forma detallada el accidente sufrido por el helicóptero
en el que viajaba junto a otros tres políticos, por sospechar
que pudo tratarse de un sabotaje, informó el portal «Globo
on line».
Acompañantes
En el helicóptero viajaban además de Calheiros, los
candidatos por el Partido de la Social Democracia Brasilena (PSDB)
para gobernador y vicegobernador del estado de Alagoas, Teotonio Vilella
y José Vanderlei, y el diputado estatal Antonio Albuquerque
del Partido Frente Liberal (PFL).
La aeronave cayó ayer cerca de la ciudad nororiental de Arapiraca,
donde hubo que realizar un aterrizaje forzado tras registrarse una
pequeña explosión en la parte trasera.
Ninguno de los ocupantes sufrió heridas de gravedad.
«Hay un ambiente de golpe»
La denuncia fue formulada por el sindicato al que perteneció
el presidente Lula Da Silva.
Sao Bernardo do Campo (Brasil) (dpa) > Sindicalistas
brasileños denunciaron ayer la existencia de «un ambiente
de golpe» en el país en vísperas de las elecciones
generales de hoy, en las que el presidente Luiz Inacio Lula da Silva
buscará la reelección.
El grupo de 21 sindicalistas intentó visitar ayer al mandatario
en la ciudad industrial de Sao Bernardo do Campo, para «manifestarle
solidaridad», según afirmó Djalma Bom, quien fue
tesorero del Sindicato de Metalúrgicos de la región
en la década de 1970, cuando Lula era el presidente de la entidad.
«Sentimos que hay un intento de golpe contra Lula y la clase
trabajadora. Vinimos acá para demostrarle que la clase está
movilizada», expresó.
El grupo no logró contactar al mandatario, pero le dejó
una carta en la que sostienen que Lula «es un hombre honesto
y con buenas intenciones que está intentando cambiar el país»,
y critica las denuncias en su contra divulgada por la prensa brasileña,
«comandada por unas pocas familias que representan a las oligarquías
del país».
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