Cipolletti > En la jornada
de ayer se generó una noticia sobre un tema más que interesante
para la región del Alto Valle y en el cuál se podría
decir que nuestro país lo tenía como deuda, y es una “Maestría
en Fruticultura”.
Fue presentado un proyecto y además se firmó una carta
de intención. En su formulación tuvieron una activa participación,
la Universidad de Bologna (Italia), el Centro Regional Patagonia Norte
y la Estación Experimental del Alto Valle del INTA, la Universidad
Nacional del Comahue y la Facultad de Ciencias Agrarias, además
tienen el apoyo del gobierno de Río Negro, de entidades empresariales,
el Consejo Profesional de Ingeniería Agronómica (Río
Negro) y obviamente las organizaciones de productores vinculadas a la
fruticultura regional (CAFI – Federación de Productores).
Por la Universidad de Bologna estuvieron presentes Mario Pakgoiz y Bruno
Marangoni, y por el INTA Daniel Miñon (Director Regional Patagonia
Norte del INTA), Alberto Diomedi (Presidente Consejo Centro Regional
Patagonia Norte, INTA), el ingeniero Carlos Magdalena (Director del
INTA Alto Valle).
Proyecto Maestría
La propuesta comprende los niveles de Especialización y de
Maestría en Fruticultura de clima templado-frío y estará
localizado en la región del Alto Valle de Río Negro
y Neuquén.
El proyecto apunta a consolidar en esta región capacidades
locales para la formación de recursos humanos altamente capacitados
en el manejo de los cultivos y de la producción en la poscosecha,
de especies frutales que tienen máxima importancia para la
Norpatagonia y para el país.
Se pretende asimismo que los egresados de esta actividad contribuyan
a reforzar los equipos docentes y de investigación con que
cuentan en la actualidad las Universidades y los Organismos de Ciencia
y Tecnología, especialmente los que están localizados
en esta región.
La estructuración de esta actividad de postgrado se realiza
con los siguientes objetivos;
Formar profesionales con elevada capacitación en la planificación
y manejo de cultivos de especies frutales de clima templado-frío
y en la selección, acondicionamiento y conservación
de la producción en la etapa de poscosecha, con una fuerte
base tecnológica.
Profundizar el conocimiento y concretar desarrollos innovativos para
obtener una producción frutícola de alta calidad, competitiva
en los mercados externos, y ambientalmente sustentable.
Desarrollar formas de colaboración internacional entre Italia
y Argentina en general, y entre el Alto Valle de Río Negro
y Neuquén y la Región Emilia-Romagna en particular,
en el campo de la tecnología y de la organización de
la producción frutícola. |