El hecho ocurrió durante la
mañana de ayer, en un quiosco de Antártida Argentina casi
Catriel.
Neuquen > Un hombre armado
que intentaba robar un quisco resultó herido de bala en una
de sus piernas, después de enfrentarse con un policía
que llegó desde un supermercado cercano y frustró el
asalto.
El hecho ocurrió a las 10:30 de ayer, en el maxi quisco Pily,
ubicado en Antártica Argentina, a media cuadra de Catriel,
según informaron fuentes policiales.
Todo comenzó cuando el asaltante irrumpió en el comercio
y amenazó a la dueña con su pistola. En ese momento,
un joven que pasaba por el lugar advirtió la situación
y le avisó a un policía que se encontraba custodiando
un supermercado próximo.
Enfrentamiento
Entonces, el uniformado se dirigió hasta el quiosco y se encontró
en la vereda cara a cara con el asaltante. Según los primeros
testimonios, el ladrón habría efectuado tres disparos:
dos contra el policía y el restante contra la dueña
del negocio, aunque sin puntería. Ante esa situación,
el policía respondió con un disparo en la pierna izquierda
del delincuente.
Una vez que capturaron al asaltante, se constató que portaba
una pistola calibre 22, con el cargador completo con balas de punta
hueca, que tienen la particularidad de provocar graves daños
en las víctimas. También fueron recuperados los elementos
que había robado, como cadenitas y relojes.
«Se ha cruzado una línea»
La violencia desplegada por el ladrón en el episodio
de ayer generó preocupación en la Policía neuquina.
Neuquén > “Es preocupante que haya
habido disparos, se ha cruzado una línea”, dijo el comisario
mayor Mario Rinzafri, director de Seguridad de la Policía neuquina,
al ser consultado sobre el estado de situación del delito en
el Oeste de la ciudad.
En declaraciones a LU5, Rinzafri precisó que el asaltante gatilló
tres veces su pistola y consideró que no se trata de un hecho
frecuente. Sin embargo, consideró que “es triste, porque
el personal policial está continuamente en la calle, expuesto
a este tipo de hechos”.
Sobre las balas utilizadas por el ladrón, indicó que
el calibre 22 es de venta “prácticamente libre”,
pero que se trata de municiones mucho más peligrosas de lo
que piensa la mayoría de la gente.
“Es muy liviana y suele rebotar después de ingresar al
cuerpo de la víctima. Además, si es de punta hueca,
se desarma cuando impacta, por lo que los daños que puede provocar
son mayores aún”, aseguró Rinzafri. |