Córdoba (NA) >
Los presidentes de los países que integran el Mercosur y varios
mandatarios invitados especialmente, entre ellos el cubano Fidel Castro,
llegaron ayer a la ciudad de Córdoba para relanzar al bloque
regional y tratar de mitigar los roces producidos por las asimetrías
y distintos conflictos a nivel bilateral.
Los mandatarios se vieron las caras por primera vez en Córdoba
hacia las 21.00, cuando comenzaron a arribar al Palacio Ferreira de
la capital mediterránea para participar de la «cena de
honor» que ofreció el presidente Néstor Kirchner
a los jefes de Estado extranjeros.
Horas antes, por la tarde, habían comenzado a arribar a esta
ciudad los presidentes Tabaré Vázquez (Uruguay), Hugo
Chávez (Venezuela), Lula Da Silva (Brasil), Michelle Bachelet
(Chile) y Fidel Castro (Cuba), entre otros, mientras que esta noche
aún se aguardaba el arribo de Evo Morales (Bolivia).
La ciudad de Córdoba, en tanto, quedó prácticamente
desierta en su casco céntrico a raíz de un fuerte operativo
de seguridad que se realizó mediante un esquema de «anillos»
en torno a los hoteles Sheraton y Holiday Inn, donde se hospedaron
los mandatarios.
Más temprano, el encuentro de cancilleres, ministros de Economía
y titulares de los bancos centrales del bloque regional permitió
analizar distintos instrumentos políticos y económicos
para avanzar en el proceso de integración, que hoy serán
ratificados o corregidos por los mandatarios del bloque.
Entre los acuerdos logrados existe el compromiso para realizar -en
un plazo de entre 30 y 60 días- una reunión entre los
ministros de Economía y de Relaciones Exteriores para «avanzar
en la resolución de esas dificultades al interior del Mercosur
(que manifestaron Uruguay y Paraguay)», indicó el canciller
Jorge Taiana.
Una visita a la casa del «Che»
Córdoba (NA-Dpa) > El presidente de Cuba,
Fidel Castro, arribó anoche a Córdoba, para participar,
como invitado, en la Cumbre de Presidentes del Mercosur. Hoy iría
a Alta Gracia a visitar la casa natal del «Che» Guevara».
Castro, que pisó suelo argentino a las 20.37, llegó
en medio de un cerrado operativo de seguridad, que incluyó
dos aviones de la aerolínea de bandera, Cubana de Navegación,
y un equipo de hombres que lo rodeó en todo momento.
Luego de que las aeronaves aterrizaran en el Aeropuerto Internacional
de Córdoba a las 20.20, el mandatario cubano permaneció
por espacio de 17 minutos dentro del avión hasta que finalmente
se dejó ver ante el nutrido grupo de periodistas que aguardaba
su llegada.
De buen semblante y saludando con la mano, Castro bajó la escalera
hacia la pista de aterrizaje donde dialogó de pie, junto al
auto que lo transportaría al hotel, con el vicegobernador deCórdoba,
Juan Carlos Schiaretti. Allí, en la pista, el presidente cubano
se mostraba sonriente luego del vuelo de más de seis horas
que lo trajo a la Argentina, mientras con las dos manos se cubría
los ojos de los flashes que recaían sobre él. Castro
llegó acompañado por una numerosa comitiva, en la que
se destacan el vicepresidente de Cuba, Carlos Lage, y el canciller
Felipe Pérez Roque. Cinco minutos después de pisar suelo
argentino, el presidente subió al automóvil BMW gris
plata que lo transportó hacia el hotel Hollyday Inn -que aloja
a todos los mandatarios.
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