En este contexto, los grandes países
buscarán asegurarse este recurso. Neuquén
> “A partir del año 2030 las reservas petroleras
del planeta no podrán satisfacer el consumo mundial de energía
como lo es ahora. Por consiguiente, las grandes potencias económicas
y militares harán todo lo posible para que no se vean afectados
sus intereses vitales (Irak fue el primer paso)”, esta es una
de las principales conclusiones de un completo trabajo que realizaron
los investigadores Ricardo De Dicco y José Francisco Freda
del Área de Recursos Energéticos y Planificación
para el Desarrollo del Idicso- Universidad del Salvador (USal).
En el estudio “Diagnósticos y perspectivas del abastecimiento
mundial y nacional de hidrocarburos”, los investigadores reafirman
que la dependencia mundial de los hidrocarburos se mantendrá
en las próximas décadas, lo que probablemente derive
en nuevos conflictos bélicos por la posesión de este
vital recurso.
Crecimiento y dependencia
“La población mundial crecerá casi un 30% durante
el período 2000-2025 (60% del crecimiento mundial de población
corresponderá al continente asiático, en particular
China e India). Como resultado de ello, el consumo energético
mundial aumentaría durante el mismo período un 102%;
y el consumo por habitante alrededor de 48%”, explica la investigación.
Estimaciones del Idicso-USal, señalan que para el año
2030 la participación de los hidrocarburos continuará
observando similar tendencia: 90% (Petróleo: 37%, Carbón
Mineral: 27% y Gas Natural: 26%). Si bien se prevé que comiencen
a operar en el período 2004-2030 una cantidad significativa
de centrales nucleares, su aporte no producirá una modificación
en el porcentual de la participación en la oferta mundial de
energía, al igual que la hidroenergía, cuyo desarrollo
está limitado por los altos costos y los escasos aprovechamientos
hidroeléctricos disponibles a nivel mundial.
La declinación
“La campana de Hubbert proyectada a escala mundial señala,
según fuentes oficiales de EE.UU., que el pico de extracción
de petróleo se alcanzaría alrededor del año 2016,
para declinar drásticamente, dejando de satisfacer necesidades
energéticas masivas entre 2030 y 2040”, sostienen los
investigadores.
En este sentido, demuestran (ver cuadro) que “los descubrimientos
de grandes yacimientos de petróleo y gas natural fueron realizados
durante el período 1950-1980; y, pese al gran desarrollo tecnológico
posterior, no se han concretado descubrimientos de importancia desde
la década del ’80 hasta el presente”.
Reservas
Al nivel de extracción petrolera y gasífera del año
2004, el horizonte de vida de las reservas mundiales alcanzaría
para sólo 44 años (2048) y las de gas natural para 65
años (2069), respectivamente. Aunque ambos horizontes disminuirían
drásticamente con tasas de crecimiento anual del 2,5% en la
extracción (véase EIA, 2004).
Las reservas de hidrocarburos más importantes se ubican en
países no industrializados. Se observa una asimetría
entre la concentración de las reservas y el consumo: la Opep
concentra el 78% de las reservas de petróleo y 50% de las reservas
de gas natural; mientras que la OECD consume el 60% del petróleo
y el 52% del gas natural disponibles en el planeta.
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