Habrá un reglamento de riego
para garantizar un límite en el uso del
riego y se instalará una chacra experimental para estudiar la
adaptación
de las especies a cultivar.
Comenzará a tomar forma el proyecto de colonización
agrícola de mayor relevancia en la Patagonia que consiste en
poner bajo riego unas 35 mil hectáreas de la meseta de Cerros
Colorados, en el vértice que forman los ríos Limay y
Neuquén. Se lo hará mediante un canal que nacerá
en el extremo sudeste del lago Mari Menuco hasta la Confluencia, cuya
obra de toma se licitará el mes próximo, junto al puntapie
que será una chacra experimental en la que se investigará
sobre cuáles son los cultivos que se adaptan a las condiciones
agroclimáticas de la meseta neuquina.
El proyecto está en manos de una Unidad Ejecutora Provincial
que integra el Consejo de Planificación y Acción para
el Desarrollo, Copade, que desarrolló una estrategia a fin
de poner en valor las tierras en base al financiamiento asegurado
de buena parte de los 250 millones de dólares que la provincia
emitirá en títulos, con el fin de cambiar la matriz
productiva que hoy es dependiente de la explotación petrolera.
También, el mes próximo se licitará la instalación
de 4 estaciones agrometeorológicas para poder tener un registro
del comportamiento del clima sobre la meseta que no es igual a las
temperaturas que se viven en los valles.
De acuerdo a lo que contiene el programa de aumento de la competitividad
e implementación de un modelo de desarrollo sustentable que
elaboró la UEP Mari Menuco – Confluencia, a través
del Ente Provincial de Agua y Saneamiento del Ministerio de Empresas
Públicas, hay tres etapas.
La primera contiene estudios de preinversión: estudios de suelo
y drenaje, mapa de suelos, estudio de impacto ambiental, mapa productivo
y un marco legal. En este último punto se propone un marco
regulatorio, tanto para la ejecución de las obras como para
su explotación posterior que conlleve un análisis jurídico
e institucional, el dominio y disponbilidad de tierras involucradas
y las figuras jurídicas para la ejecución y explotación.
En buen romance esto significa que como se está trabajando
sobre un ecosistema desértico, se pretende que su cambio a
la producción contenga límites como el uso de agua y
el respeto por las zonas a explotar.
La UEP proyectó unas 20 mil hectáreas para uso agrícola
y 15 mil para uso forestal, estimando una utilización de 34
metros cúbicos de agua por segundo para el riego, de forma
de garantizar unos 10 milímetros por hectárea y por
día.
Para ello se hará una chacra experimental en el perilago a
fin de establecer allí una unidad de investigación y
desarrollo para ver la adaptación genética de especies
dignas de cultivo. Esto se hará en paralelo a la obra de la
toma.
La segunda etapa son los proyectos ejecutivos que incluye la toma,
la conducción del canal que se pretende hacer en forma de ducto
o bien tapado para evitar contaminación, riesgo que se correría
en caso de hacerlo a cielo abierto, el riego y el drenaje, las plantas
potabilizadoras para abastecer a las cinco ciudades de la Confluencia
y la estación experimental agropecuaria.
La tercera etapa son las obras en sí y la infraestructura complementaria,
es decir, construcción y mejora de caminos, viviendas, escuelas,
instalaciones sanitarias, seguridad, comunicaciones y energía.
Toda la zona tiene unas 66.000 hectáreas y, según explicó
el técnico Walter Ceballos de la UEP, se clasificaron en cuatro
unidades en función de su aptitud agrícola: muy aptas,
aptas, relativamente aptas y no aptas. Así, en función
de una clasificación internacional se determinó que
las mejores son 35 mil hectáreas.
Ceballos dijo que se planificó la realización de un
reglamento de riego y drenaje dividiendo el terreno en unidades de
50 hectáreas para uso agrícola y de 100 hectáreas
para uso forestal. En cada una de ellas se instalará un limitador
de caudal y un medidor volumétrico para garantizar los 10 milímetros
por día y por hectárea, ni una gota más y ni
una gota menos.
En cuanto a la infraestructura hidráulica, Ceballos informó
que la intención es hacer un canal gravitacional para evitar
el uso de bombas para elevar el riego, aunque en una de las zonas
se deberá recurrir a este sistema.
Después de la toma se hará la obra de conducción
con una capacidad de 40 metros cúbicos por segundo que va a
ir disminuyendo a medida que se utilice el agua para el riego, hasta
un determinado punto en el que habrá un distribuidor hidráulico
desde el cual se llevará el agua a tres plantas potabilizadoras.
Una será para la ciudad de Neuquén con 4 metros cúbicos
por segundo, otra planta para Plottier y Senillosa y la tercera para
Centenario y Vista Alegre. La capacidad total de agua potable será
de 510 mil metros cúbicos por día, es decir, unos 500
litros de agua por día y por habitante para un millón
de personas.
Dos objetivos
El canal Mari Menuco Confluencia tiene dos objetivos: el riego y
la provisión de agua potable. De acuerdo al programa de la
Unidad Ejecutora Provincial se pretende convertir a una importante
zona de la provincia de Neuquén en un polo agroindustrial de
desarrollo, mediante la construcción de infraestructura hídrica
para actividades económicas productivas, acompañada
de otros elementos claves para estimular un desarrollo territorial
basado en la producción de los agronegocios, y en la estructuración
de cadenas productivas, con la participación de empresarios
nacionales e internacionales, garantizando la igualdad de oportunidades
de participación a los pequeños y medianos productores
locales y regionales.
Sin dejar de tener en cuenta también el asegurar agua potable
en cantidad y con la mejor calidad a todos los habitantes de la Confluencia.
Expropiación
En el proyecto de planificación de la Unidad Ejecutora Provincial
se hizo un análisis sobre la propiedad de las tierras que están
involucradas en el mega proyecto. Hay tierras fiscales, privadas y
de empresas que ya fueron privatizadas.
Es por ello que se prevé enviar un proyecto a la Legislatura
provincial para declarar de utilidad pública y sujeto a expropiación
los terrenos que adquirirán valor a partir del servicio de
riego.
Existen grandes bajos como se observa en el croquis con una fotografía
satelital que están siendo estudiados respecto a cuánto
es lo que soportan la retención de agua. Se trata de los bajos
Los Barreales Chico y Grande y El Salitral ubicado a la altura de
Senillosa.
Los números del canal
20.000
serán los puestos de trabajo directos en la actividad primaria
que se prevé generará la puesta en marcha de los cultivos
y la forestación sobre la meseta.
2014 será
el año en el que se terminará todo el proyecto que comenzará
a partir del año que viene.
66.000
son las hectáreas en total que involucrará el proyecto,
de las cuales se seleccionaron 35 mil que se destinarán al
uso agrícola y forestal.
50 hectáreas
tendrán las unidades económicas que se dedicarán
a la agricultura y 100 hectáreas las parcelas en las que se
hará forestación.
10 milímetros
de agua por día y por hectárea es lo que se dará
cada 50 hectáreas con la instalación de un limitador
y un medidor volumétrico.
72 son
los millones de dólares, el costo de la obra del canal con
tapa o ducto que unirá el límite sudeste del lago Mari
Menuco con la zona de la Confluencia.
140 son
los millones de pesos que costará la distribución y
las plantas potabilizadoras.
510 mil
metros cúbicos por día es lo que se potabilizará
para dar 500 litros de agua por habitante para un millón de
habitantes.
4 serán
las estaciones meteorológicas que se instalarán en la
zona para tener registros del comportamiento climático.
1.5 serán
las veces que se multiplicarán los empleos primarios en la
producción sobre la meseta con la industrialización
y servicios que se generarán.
700 serán
los kilómetros de caminos internos del complejo. |