Neuquén > La ciudad
sigue esperando por la última película del realizador
argentino Daniel Burman, que viene de recibir tres premios en el reciente
Festival de Cine de Mar del Plata y al que el director definió
como «una comedia que habla sobre el momento en que un tipo termina
de asumir que en la vida no hay certezas».
El quinto film de Burman, quien debutara en 1997 con «Un crisantemo
estalla en cincoesquinas» y que fue galardonado con los premios
del Público, Mejor Film Iberoamericano y Signis en Mar del Plata,
lo muestra como un realizador maduro, con una absoluta claridad para
ir marcando los ritmos narrativos, un humor fino y sostenido y una inusitada
claridad para destacar ciertos clichés de una parte de la sociedad
argentina.
«Tengo cierta fascinación por hacer visible lo invisible,
esas cosas que se esconden en la vida cotidiana, en pequeñas
reuniones, en una cena, que por ahí son detalles pero que describen
un mundo y una persona», aseguró Burman a Télam
en una charla mantenida en el hotel Hermitage, luego de la presentación
de la película en el festival que finalizó el sábado
último.
El realizador que con «El abrazo partido» ganara el Oso
de Plata a la Mejor Película en el Festival de Berlín
de 2004, definió al nuevo film como «una comedia con cierta
tintura meláncolica porque atrapa al personaje en un momento
de la vida en que termina
de asumir que no hay certezas».