El cuestionado dirigente político
tenía 64 años. Sus seguidores recibieron
la noticia con estupor.
La Haya (dpa) > El ex presidente
yugoslavo Slobodan Milosevic murió en prisión, según
informó ayer el Tribubal Penal Internacional para la ex Yugoslavia
(TPIY), ante el que estaba siendo juzgado por crímenes de guerra.
El político, de 64 años, fue encontrado sin vida poco
después de las 08:00 GMT (5 de la Argentina) en su cama de
la prisión de Scheveningen, cerca de La Haya. Un médico
convocado de inmediato certificó el deceso. Por el momento
se desconoce si falleció de muerte natural.
El hermano de Milosevic, Borislav, acusó al TPIY de ser culpable
de su muerte. «La responsabilidad del hecho es del TPIY»,
dijo en Moscú, donde vive desde que se desempeñaba allí
como embajador. También residen en la capital rusa la mujer
y el hijo del ex presidente.
El 24 de febrero, el Tribunal denegó a Milosevic un traslado
para recibir tratamiento médico en Moscú en una clínica
especializada, con el argumento de que temía que no regresara
a La Haya para seguir con el juicio.
Milosevic estaba detenido desde junio de 2001. Desde febrero de 2002
era juzgado por genocidio por diversas guerras en los Balcanes en
los anos 90, tras la disolución de Yugoslavia. El objetivo
era cerrar las audiencias orales en mayo.
La tesis del crimen
La inesperada muerte de Slobodan Milosevic levantó en Serbia
de inmediato especulaciones acerca de que fue asesinado.
La tesis del crimen contribuirá a la teoría conspirativa
de los seguidores del ex presidente yugoslavo, que afirma que la corte
de la ONU en La Haya es un medio creado por Occidente para destruir
a Serbia.
El partido de Milosevic ha perdido a su emblemática figura,
pero no por eso sale debilitado. |