En la década del ’90
comenzaron las primeras huertas orgánicas y los primeros amantes
de la perfección física se enrolaron en la legión
de quienes se alimentan como el hombre primitivo.
El fuego, elemento indispensable para el desarrollo de los primitivos
seres humanos, tiene ya unos 120 años de uso. Sin dudas fue
uno de los factores determinantes que permitió que la especie
no sólo se protegiera del frío sino también que
aprendiera a asar los primeros animales que cazaron para luego convertirlos
en deliciosas presas.
Sin el dominio del fuego, el ser humano se hubiera extinguido. En
la actualidad, el movimiento, nacido en España, que va ganando
popularidad, se llama “Crudivorismo”. Uno de los slogans
que penetran en el mercado norteamericano (acosado por una población
creciente de obesos) es “Comer bien sin cocinar”.
Como el primitivo
Se trata simplemente de una dieta basada en el consumo exclusivo de
vegetales, hortalizas, frutas frescas y secas, hongos, granos y eventualmente
miel o algas marinas.
La premisa que mueve a los “Crudivoristas” es que el cuerpo
humano estaría preparado para consumir sólo los alimentos
tal como la naturaleza los provee al igual que lo consumen los animales
en estado salvaje.
Aunque la afirmación no tiene base científica, los animosos
y fanáticos practicantes del movimiento “Crudivorista”
no se preocupan con esto.
El brasileño David Wolfe, iniciador de esta cadena en su país,
asegura no darle importancia a que las universidades no apoyen esta
teoría porque -segun afirma- se opone a los intereses de las
grandes corporaciones dedicadas al rubro de la alimentación
Este movimiento apareció en el principio de la década
del ‘90, y sus primeros fanáticos son estrellas de Hollywood:
Silvester Stallone, Demi Moore y Harrison Ford entre los que han dado
a conocer sus costumbres alimentarias.
Por su parte, según afirman, Demi Moore atribuye su «forma
física» a la dieta cruda, al margen de sus horas de masajes
y gimnasia.
Sin tomar en cuenta las costumbres de las celebridades, el Crudivorismo
ha inspirado a gastrónomos quienes consideran que mantenerse
dentro de la dieta es la publicidad más eficaz para este novedoso
estilo de nutrición.
Gastronomía al «uso crudo»
¿Quién no ha acompañado la carne asada con ensaladas
y frutas? Se trata de un menú convencional al que se le quita
el consumo de carne.
Los gastrónomos ponen el acento en los ingredientes y las maneras
de procesar. Ninguna receta excede la temperatura de un día
caliente de verano. Según afirman, esto permite darle a cada
bocado crudo un sabor inusual.
En los Estados Unidos abrieron sus puertas más de sesenta restaurantes
dedicados al Crudivorismo como también en Canadá ya
se sumaron cinco a la nueva corriente.
En países tropicales como Costa Rica se abrieron talleres gastronómicos
y balnearios donde se cultiva el hábito crudivorista y en Brasil
la moda llegará a su punto más alto en el próximo
verano.
En la vieja Europa, amante de la renovación, vegetarianos y
macrobióticos se sumaron a la legión Crudivorista mayoritariamente
en países como España, Inglaterra, Holanda, Suiza y
Alemania.
Buenos y malos
Crudivorismo es la simple dieta de todas las criaturas de la tierra.
Dentro de los alimentos prohibidos, aún crudos, se encontrarían
los brotes de bambú, el garbanzo y la soja que, según
afirman, podría producir ciertos desequilibrios hormonales
en las mujeres.
En la actualidad en Brasil se dictan clases a los que se quieren iniciar
en este nuevo estilo de alimentación. Se trata de talleres
gastronómicos donde pueden aprender a hacer jugo de clorofila
y preparar el alimento crudo.
De esta forma los interesados reciben entrenamiento para realizar
un almuerzo compuesto por una manzana y un puñado de almendras.
También enseñan a preparar extractos de frutas, de nueces,
de semillas y hortalizas. Los inician en la producción de huertas
orgánicas y en la plantación de árboles frutales
que, según los crudivoristas, son “alimento buenos”.
Frutas preferidas
Aceituna, Apricot, Almendra, Avellana, Maní, Cereza, Ciruela,
Damasco, Frambuesa, Fresa, Frutilla, Granada, Higo, Pera, Kaki, Kiwi,
Limón, Melón, Mora, Mandarina, Manzana, Pomelo, Mango,
Melocotón, Naranja, Níspero, Nuez, Pepino, Pistacho,
Banana, Pomelo, Sandía, Tomate, Uva.
Original decálogo para convertirse
en Un auténtico “crudo”
 Amor a
la naturaleza y sus leyes
No a los
medicamentos
Confiar
en la energía vital
Ayunar
para desintoxicar el organismo
Desarrollo
de artes musicales
Vida comunitaria
Yoga, meditación
bioenergética y masajes
Fanáticos en todas partes
En las
cercanías de Málaga se encuentra el centro crudivorista
más importante de Europa.
Madrid > La FincaCruda está situada en
la Sierra de Alpujata, al lado del Arroyo del Viejo, con vistas al
valle, con orientación al Sur. El sol da durante todo el día
en toda la finca. En plena naturaleza, el pueblo más cercano
está a 3 kilómetros, Monda (Málaga), Costa del
Sol-Andalucía. El pueblo más grande, a 17 kilómetros
es Marbella, Coín está a 8 kilómetros. La playa
a 15 minutos en auto y a 20 kilómetros de la FincaCruda se
encuentra Málaga y su aeropuerto internacional a 40 kilómetros.
El clima es soleado todo el año, subtropical, en invierno de
15 a 20º C, por la noche normalmente no baja de 10º C.
La Comunidad Cruda tiene 3 hectáreas de frutales y hace catorce
años que practican la dieta-cruda.
No tienen animales domésticos prefieren un bosque de árboles
frutales, naranjos, mandarinos, ciruelos, perales, manzanos, almendros,
olivos, granados, etc.
Los alrededores de la FincaCruda están libres de químicos,
ya que en su mayoría son huertas orgánicas.
La Finca Cruda es una comunidad de personas de varios países
que viven la naturaleza a pleno sin cocinar y, hasta el momento, es
la más importante dentro del abanico de las crudívoras
en el mundo.
Mitos y verdades
El crudivorismo
cura todas las enfermedades, incluido el cáncer.
V: No hay evidencias que lo puedan afirmar científicamente.
Pueden
suplir todas las necesidades nutricionales.
V: Carece de proteínas, calorías y elementos como la
niacina, la vitamina B12 y el hierro.
El crudivorismo
surgió hace seis mil años, entre los esenios, en Palestina.
V: Todavía no se sabe exactamente cuál era la alimentación
de ese pueblo.
La comida
cruda es tan saludable que permite vivir 120 años o más
V: No hay registro de ninguna persona, que haya vivido tanto por comer
frutas y verduras crudas.
No hay nada mejor que abandonar la cocina
Es una nueva rama del vegetarianismo. La variante está
en la cocción que se hace con los rayos del sol.
Dentro de los cultores de la vida natural están los semivegetarianos
y los parcialmente vegetarianos que se permiten incluir en sus dietas
pollo, pescado, lácteos y huevos. También existen los
vegetarianos verganos que sólo consumen vegetales y desprecian
los derivados de la matanza de animales. No sólo en lo alimentario,
los vegetarianos verganos nunca se vestirán con cuero, lana,
seda y tampoco utilizarán cosméticos.
Los nombres atados a la dieta son variados y definitorios: lacto-ovovegetarianos,
ovovegetarianos, frugívoros. A estas corrientes se les sumó
la nueva moda del Crudivorismo que se caracteriza por no cocinar,
por no calentar las comidas y además por ingerir todo alimento
en su estado natural. Esta circunstancia les permite afirmar que llevan
a su organismo los atributos más valiosos de la pirámide
alimenticia.
Los crudivoristas están seriamente comprometidos en concretar
un cambio a nivel planetario, esto es regresar realmente a lo natural.
Menúes
Desayuno: Cereales crudos (granolas), jugo de clorofila,
de arroz o jugo de naranja. Un puñado de nueces y otro de almendras
y varias rodajas de manzana pelada. Colación: Un durazno o
una banana a media mañana. Almuerzo: Ensalada de cuatro elementos
bien rallados : Repollo blanco, remolalcha, zapallo calabaza, y papa.
Condimentos. Aceite de oliva de primera marca y jugo de limón.
Cena: Ensalada de Frutas.
En la actualidad, en Costa Rica por ejemplo, existen ecoaldeas donde
todo se cocina al calor del sol.
El consumo diario de frutas y hortalizas crudas tiene el aval de importantes
organismos de nutricion a nivel internacional.
Beneficios
Evita la ‘leucositosis digestiva’ producida por los alimentos
cocinados.
Promueve una fácil digestión y una mejor asimilación
de los nutrientes.
Para tener en cuenta: Los alimentos deben estar libres de residuos
tóxicos, libres de pesticidas o herbicidas que son peligrosos.
Según afirman, el principal ideólogo del ahora denominado
Crudivorismo fue Hipócrates, a quien se conoce como el primer
médico quien curaba, 500 años antes de Cristo en la
Antigua Grecia, con elementos de la naturaleza.
|
