La impugnación fue promovida
por el kirchnerista Miguel Bonasso y
apoyada por otros legisladores.
Buenos Aires (Corresponsalía) >
Fue un debate duro, con momentos de alta tensión. Convocada
para la jura de los nuevos legisladores, la sesión preparatoria
de la Cámara de Diputados quedó dominada ayer por la
decisión de una amplia mayoría del cuerpo de impedir
la asunción del ex comisario Luis Patti por las acusaciones
de violaciones a los derechos humanos que pesan en su contra.
Fue la primera vez, desde la recuperación de la democracia
en 1983, que un debate por impugnaciones quedó convertido en
el eje de una ceremonia de asunción de flamantes legisladores
electos.
Con el vital apoyo de organismos de derechos humanos, la embestida
contra Patti fue encabezada por los diputados kirchneristas Miguel
Bonasso y Araceli Méndez de Ferreira y logró el respaldo
de la mayoría de las fuerzas políticas que sumaron un
total de 112 votos contra apenas 8 pronunciamientos negativos y 9
abstenciones.
“En la cárcel”
“Los torturadores deben estar en la cárcel y no en el
Congreso”, argumentó Méndez de Ferreira al reclamar
el voto contra la jura de Patti al que adhirieron también los
diputados del Frente para la Victoria, el ARI, la Unión Cívica
Radical (UCR), la centroderecha y fuerzas provinciales. El pliego
de Patti fue girado a la Comisión de Peticiones, Poderes y
Reglamento.
Bonasso, por su parte, aseguró que la ofensiva contra el ex
comisario de la Policía Bonaerense, quien resultó electo
en los comicios del 23 de octubre en una alianza con el duhaldismo
en la provincia de Buenos Aires, no estuvo animada “ni por odio,
ni por revancha”. “Quienes cometieron crímenes
de lesa humanidad no tienen la idoneidad moral que exige la Constitución
para ser diputado”, explicó.
El legislador kirchnerista pronunció su discurso en medio de
los silbidos y abucheos de los simpatizantes de Patti entre quienes
se escuchó vivar al ex dictador Jorge Rafael Videla.
Ayer, fuentes parlamentarias del oficialismo confiaron a este diario
que el amplio consenso que dejó a Patti sin banca presagia
un final poco feliz para el ex comisario quien ahora deberá
esperar a que la comisión respectiva aconseje o no su asunción
al cuerpo. “Todo indica que se trata de un caso similar al de
(Antonio Domingo) Bussi”, ampliaron las fuentes.
Por una impugnación similar a la presentada ayer contra Patti,
el ex dictador tucumano tampoco pudo jurar ni asumir en 1999.
Historia
Ayer, Patti cargó con su propia defensa y después de
negar que tenga causas abiertas en la Justicia lanzó una advertencia.
“No miremos la historia con un solo ojo y menos el de la izquierda.
Porque la historia se puede repetir. El Paufe y esta persona jamás
tuvieron una posición antidemocrática”, dijo sobre
sí mismo y la fuerza que lidera.
Mejor suerte que Patti fue la que corrió el médico Eduardo
Lorenzo Borocotó, cuyo “pase” a las filas kirchneristas
fue el sustento de la impugnación presentada por el macrismo.
Eclipsado por el impacto del debate político e ideológico
en torno al ex comisario, Borocotó logró jurar como
diputado gracias a una ajustada votación con 124 pronunciamientos
a su favor y 102 en contra.
La misma votación del plenario legislativo favoreció
también a la legisladora kirchnerista por Mendoza Susana Genem,
quien había sido objetada por el ARI de Elisa Carrió.
“Siempre fui un hombre prudente, responsable y libre. Tener
ideales, tener principios y ejercer mis libertades parece ser un crimen
que no perdonan sumisos”, dijo el médico, blanco de sonoros
abucheos.
Autoridades
Además de la jura de los 127 diputados electos en los comicios
del 23 de octubre, la sesión de ayer enmarcó también
la asunción de las nuevas autoridades del cuerpo.
La Cámara baja consagró al kirchnerista Alberto Balestrini
como nuevo presidente, en reemplazo del duhaldista Eduardo Camaño,
y a la ex subsecretaria de Defensa del Consumidor, Patricia Vaca Narvaja,
como vicepresidenta primera. Se trata de dos dirigentes de extrema
cercanía con el presidente y la Casa Rosada.
El radical Fortunato Cambareri fue confirmado como vicepresidente
segundo del cuerpo en tanto que una pulseada entre el duhaldismo –propone
a Camaño- y el interbloque macrista Propuesta Federal dejó
pendiente la designación del vice tercero que, según
la evaluación opositora, no puede recaer en una “línea
interna” del oficialismo.
Fuerte silbatina para Borocotó
Buenos
Aires (NA)> En medio silbidos que casi taparon el acto
de juramento, Eduardo Lorenzo «Borocotó» asumió
ayer su banca de diputado e inmediatamente abandonó le recinto,
donde había escuchado todo tipo de cuestionamientos a su pase
desde el macrismo hacia el oficialista Frente para la Victoria.
Borocotó juró como diputado luego de que la Cámara
baja rechazara las impugnaciones presentadas en su contra por 124
votos contra 102, mientras seis legisladores se abstuvieron.
Pero el médico tuvo la «mala suerte» de que la
fórmula que eligió para votar -por Dios, la Patria y
los santos evangelios- fue elegida sólo por él (dentro
de los diputados elegidos por laCapital) por lo que debió jurar
en soledad, por lo que recibió una silbatina generalizada.
No obstante, Borocotó fue defendido por el oficialismo kirchnerista,
que se esforzó por separar su caso del de Luis Patti, a quien
la Cámara de Diputados le frenó la asunción.
«El límite es la violación a los derechos humanos,
porque si no una mayoría circunstancial puede decidir que un
diputado elegido en elecciones no ingrese al recinto. No hubo ninguna
impugnación de orden constitucional», dijo el diputado
Agustín Rossi, que será jefe del bloque oficialista
desde el 10 de diciembre.
Contra Borocotó se presentaron cuatro impugnaciones, pero fue
el coordinador del Interbloque Propuesta Federal (el Pro más
los partidos provinciales), Federico Pinedo, quien más claramente
expresó las razones de la impugnación al subrayar que
con su pase «se falseó el resultado de la elección
mediante un engaño».
Borocotó sintetizó su defensa al sostener: «Siempre
he sido profundamente libre y reponsable. Ejercer mis libertades parece
que es un crimen que no me perdonan los sumisos».
Sus palabras no evitaron que los legisladores de distintos bloques
cuestionaran su accionar y dispararan contra su «transfuguismo
político», por lo que votaron a favor de que la impugnaciones
en su contra sean analizadas por la Comisión de Poderes, Peticiones
y Reglamentos de la Cámara baja.
«No se trata del mismo caso de Patti, pero estamos ante un caso
de travestismo político que tanto daño ha hecho a la
sociedad», dijo el diputado y economista de la CTA Claudio Lozano,
mientras desde el ARI, Eduardo Macaluse sostuvo: «se trata de
un caso de corruptela y transfuguismo político que nosotros
mismos hemos padecido».
Con esas palabras, el jefe del bloque del ARI se refirió a
la interventora del PAMI, Graciela Ocaña - y a Rafael Romá,
quien dejó las filas aristas para trabajar en la administración
ibarrista. |