La disputa recién comienza y,
de seguir las cotizaciones del crudo altas, habrá mucha tela
para cortar. Neuquén > La mayor
economía del mundo está preocupada y no es para menos,
la constante alza del crudo ha generado una inflación récord
y una retracción de crecimiento económico. Por eso no
extraña que las disputas entre empresas y políticos
estén a la orden del día. Como en la Argentina, pero
a otra escala.
“Las mayores empresas petroleras del país defendían
sus ganancias trimestrales combinadas de más de 30.000 millones
de dólares, en una audiencia en el Senado donde los legisladores
demandaban conocer cuándo bajarían los precios”,
explicaba la semana pasada un cable de la Agencia Reuters.
Empresas
Entre los testimonios en la audiencia estuvo el de Lee Raymond, el
brusco presidente ejecutivo de Exxon Mobil Corp. (XOM.N), la cual
obtuvo las mayores ganancias de la historia, de 9.900 millones de
dólares, sobre ingresos de 100.000 millones en el tercer trimestre.
Raymond se está retirando de la empresa en pocas semanas, luego
de 12 años de liderar una empresa petrolera considerada por
los analistas de Wall Street como una de las mejor operadas de la
industria.
También testificaron sus contrapartes de Chevron Corp., ConocoPhillips
y las unidades estadounidenses de BP Plc y Royal Dutch Shell Plc.
En comentarios preparados que fueron puestos a disposición
antes de los testimonios, Raymond de Exxon reiteró -como generalmente
lo hace- que los programas de inversiones de la empresa podrían
no cambiar al ritmo de los precios de las materias primas si lo que
tiene que hacer es satisfacer es cubrir la creciente demanda de energía.
«En política, el tiempo se mide en 2, 4 ó 6 años,
basados en los ciclos eleccionarios», dijo. «En la industria
de la energía, el tiempo se mide en décadas, basado
en los ciclos de vida de nuestros proyectos».
Raymond también advirtió que cualquier castigo sobre
las empresas petroleras podría perjudicar aún más
a las inversiones en la producción doméstica de petróleo.
«La historia nos enseña que las medidas punitivas, tomadas
precipitadamente como reacción a las fluctuaciones de corto
plazo de los mercados, posiblemente tendrán consecuencias negativas
no deseadas, incluida la creación de desincentivos para la
inversión en proyectos domésticos».
Políticos
Los legisladores republicanos, quienes empujaron este año un
proyecto con un paquete de incentivos por 14.500 millones de dólares
para la industria de la energía, dijeron que harían
preguntas difíciles sobre las abultadas ganancias.
«Las empresas petroleras les deben a los estadounidenses una
explicación», dijo Pete Domenici, presidente del Comité
de Energía del Senado. «Los estadounidenses están
enfrentando dolorosos aumentos en los precios en las gasolineras,
si usted lo cree así o no, ellos lo creen».
Varios planes han sido elevados por republicanos y demócratas
sobre un impuesto a la avalancha de ganancias sobre el petróleo,
y sobre fuertes castigos contra el acaparamiento. Ninguno consiguió
salir adelante.
El republicano Charles Grassley, titular del Comité de Finanzas
del Senado, dijo que trataba de «poner en un aprieto»
a la industria, para que done el 10 por ciento de las ganancias para
ayudar a los estadounidenses más pobres a pagar los costos
de la calefacción para invierno.
Un proyecto más modesto de la bancada republicana quiere suspender
la comisión federal de 10 dólares para recolectar leña
en los bosques nacionales para ayudar a las familias a hacer frente
a los altos costos de calefacción.
Precios
Los precios del petróleo crudo estadounidense, que escalaron
a un récord de 70,85 dólares el barril apenas después
de que el huracán Katrina azotara Louisiana a finales de agosto,
están ahora por debajo de los 60 dólares el barril,
en medio de un cálido clima otoñal.
El promedio de los precios minoristas de la gasolina superó
los 3,07 dólares por galón, luego de la tormenta, pero
ha caído a 2,38 dólares el galón. No obstante,
hay más aumentos en el camino.
El gobierno de Estados Unidos pronosticó que los costos de
la calefacción a gas natural en el centro de Estados Unidos
aumentarían cerca de un 50 por ciento durante este invierno,
mientras que los costos de calefacción a petróleo en
el Noreste subirían un 25%.
Retenciones a la norteamericana
Neuquén > Se sabe que las retenciones
fue un mecanismo que adoptó el gobierno nacional para desalentar
las exportaciones de crudo y, de esta forma, controlar el precio de
los combustibles. En Estados Unidos, el Senado está a punto
de aprobar un proyecto que podría ir aún más
allá.
En efecto, la Secretaría de Energía de Estados Unidos
ganaría la autoridad para prohibir temporalmente las exportaciones
de gasolina, combustible de calefacción y otros productos refinados
de petróleo estadounidense durante una emergencia de suministro,
bajo un proyecto de ley introducido en el Senado del país del
Norte.
Según el proyecto, introducido por el demócrata Herb
Kohl de Wisconsin, las exportaciones de productos de petróleo
de una región específica del país podrían
prohibirse si el secretario de Energía, Sam Bodman, determina
que los suministros en ese área han caído o caerían
por debajo de la demanda esperada.
Kohl y la senadora republicana Susan Collins de Maine habían
solicitado a ocho grandes compañías petroleras la semana
pasada que no exportaran este invierno combustible de calefacción
para contribuir a que los precios no subieran y asegurar el suministro
adecuado para el mercado estadounidense.
Exportaciones
«Creemos que deteniendo dichas exportaciones, sus compañías
podrían aliviar significativamente la esperada carga de precios
vertiginosos para la calefacción de hogares en el próximo
invierno», precisó una carta de los legisladores dirigida
a los directivos de las mayores productoras de combustible de calefacción
para hogares de Estados Unidos.
Los altos ejecutivos de grandes compañías petroleras
que testificaron esta semana en una audiencia del Senado sobre las
ganancias récord de la industria recibieron críticas
por exportar productos de petróleo estadounidense luego de
que el huracán Katrina interrumpiera los suministros domésticos
de gasolina.
Los ejecutivos defendieron sus embarques de petróleo, parte
de los cuales fueron enviados a países del Caribe, Canadá
y México, diciendo que esas exportaciones han constituido actividades
normales durante años.
Balanza comercial
Las exportaciones de petróleo estadounidenses promediaron casi
1,3 millones de barriles por día durante los primeros nueve
meses de este año, 26 por ciento en alza con respecto al mismo
período del 2004, de acuerdo a datos del Instituto Americano
de Petróleo (API por su sigla en inglés).
Entretanto, las importaciones de crudo y de productos de petróleo
promediaron 13,2 millones de barriles diarios, 1,2 por ciento en alza,
dijo el API. |