Para la película, el actor debió
bajar más de 15 kilos de peso y accedió a que sus párpados
fueran pegados durante las 14 horas de rodaje diario, por el lapso que
durara la producción del film «Ray».
«Tener los ojos pegados 14 horas al día resultó
como una condena de prisión», aseguró el actor.
Foxx sufrió varios ataques de pánico los primeros días
hasta que finalmente se acostumbró a vivir en la oscuridad.
Según Foxx, incluso sus colegas olvidaban por momentos que sus
ojos estaban sellados y lo abandonaban a su suerte, pensando que el
actor encontraría la forma de regresar al set de producción
sin ayuda de un «vidente». «Ray» es dirigida
por Taylor Hackford y relata la vida del músico de jazz y blues
desde su infancia en el sur estadounidense, pasando por su adicción
a la heroína y culminando con su carrera artística de
fama internacional. Foxx conoció en persona a Charles varias
semanas antes de que se iniciara el rodaje en un estudio de grabación
en Los Ángeles.