El presidente de Colombia dijo que
la guerrilla amenazó a sindicalistas
para que marchen en su contra.
Bogotá (dpa) > El presidente
colombiano, Álvaro Uribe, acusó a las Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombia (Farc) de amenazar de muerte a varios
líderes sindicales para obligarlos a marchar en la huelga general
que convocaron los trabajadores e indígenas en contra de las
políticas del mandatario y su eventual reelección.
«Sí, puedo decir que las Farc han amenazado a líderes
sindicales, a quienes han conminado a que deben estar en el paro y
si no lo hacen, los asesinan. No puedo revelar sus identidades ya
que eso los pone en peligro», declaró ayer el mandatario.
Uribe aseguró que las marchas contra él «están
intimidadas» por miembros de las Farc, que han expresado su
rechazo a todas las políticas del jefe de Estado. «Soy
partidario de una protesta tranquila, ordenada, sin acciones violentas,
ni anarquía, pero si hay bloqueos de (calles o carreteras)
o hechos violentos actuaremos con las autoridades», comentó.
A la vez, el mandatario hizo un llamado a los dirigentes sindicales
a que reconozcan que su gobierno ha realizado «grandes esfuerzos»
para protegerlos.
Los principales sindicatos y partidos de izquierda marcharon ayer
por las principales ciudades del país contra la posible reelección
de Uribe -que estudia la Corte Constitucional- y el Tratado de Libre
Comercio (TLC) que se negocia con Estados Unidos.
«El TLC no es un asunto ideológico, sino práctico
por cuando éste tendrá una enorme influencia en la generación
de empleo», añadió Uribe.
Columna indígena
Asimismo, unos 20.000 indígenas marcharon contra Uribe y sus
políticas desde el domingo anterior hasta la ciudad de Manizales
(Oeste). En los enfrentamientos entre la Policía y los nativos
murió un aborigen y 20 resultaron heridos. «Marchamos
contra la reelección inmediata del presidente Uribe, pues no
es lógico ni ético que el mandatario sea simultáneamente
candidato presidencial, jefe de Estado, y utilice los recursos del
presupuesto de la nación para su campaña», comentó
Carlos Rodríguez, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores
(CUT).
Por su lado, el alcalde de Bogotá, Enrique Borda, aseveró
que las marchas de protesta se cumplieron pacíficamente por
la calles de Bogotá y llegaron hasta la Plaza Bolívar,
donde se encuentra la sede del Congreso, la Alcaldía y la Corte
Suprema de Justicia.
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