Después de todo lo que se dijo en Chile
del partido de Uruguay y Argentina, los jugadores trasandinos se quedaron
sin palabras al no poder ganar su encuentro, y debieron dejar el estadio
de Santiago ante una enorme silbatina de su público. El 0 a 0
ante un Ecuador plagado de suplentes no les dejó soñar
al menos un rato con entrar al repechaje, porque sus dos rivales directos
si lograron ganar. Desde los primeros minutos los nervios le jugaron
en contra al local. El equipo pareció sentir los efectos del
tempranero gol de Colombia en Asunción y no podía abrir
la cerrada defensa ecuatoriana. De a poco, y empujado por su público
la Roja se lanzó con todo en busca de la apertura del marcador,
y empezó a dominar el juego, aunque sin conseguir demasiada claridad.
Así se pasó también la segunda parte, sin muchas
situaciones de gol pero con la tensión por las nubes. El apoyo
dejó de ser tal, y el pitazo de Elizondo fue el disparador de
la catarata de insultos hacia los jugadores.