| El personal del vivero seguirá
siendo empleado provincial. La Municipalidad deberá ocuparse
de las labores culturales de los rodales. Huinganco
> El gobierno provincial transfirió al municipio
los bosques de esta localidad. La comuna deberá hacerse cargo,
por el lapso de dos años, de realizar las labores culturales
en más de 2.500 hectáreas implantadas y podrá
utilizar, a cambio, las varas que resulten del raleo y la poda de
las coníferas para el beneficio de la comunidad.
El intendente Luis Sepúlveda ya piensa en crear un prototipo
de vivienda social con el material que hasta ahora era descarte y
anhela concretar en ese lapso el proyecto de Bosque Modelo “Norte
del Neuquén”.
Dentro de esta propuesta, Huinganco es una de las comunidades que
más ha avanzado con esta experiencia de planificación
que involucra la asociación de voluntades para lograr el desarrollo
sustentable.
Esta localidad tiene actualmente 2.500 hectáreas de bosques
y una trayectoria forestal de 30 años. Es pionera en la materia
a nivel país y cuenta con el vivero forestal más grande
de la provincia. Formar parte de la red internacional de Bosques Modelos
le permitiría a toda la zona Norte neuquina acceder a financiamiento
externo y el asesoramiento para la ejecución de diversos proyectos,
impulsados por la comunidad.
Poda, raleo y más
“Hemos intensificado los trabajos de poda y raleo en los bosques
El Calvario y Rahueco. En esta gestión hemos realizado esas
tareas en 40 hectáreas, que es poco pensando en la cantidad
de hectáreas que tenemos implantadas -admitió el jefe
comunal- Pero -aclaró- concretar esas tareas insume aproximadamente
8 mil pesos al mes, una cifra considerable si se tiene en cuenta que
ésta es una Municipalidad de tercera categoría”.
“Transferirnos el manejo de los bosques es una inversión
a futuro”, opinó. “Porque lo que hoy sacamos del
bosque no tiene un valor alto. Es leña y varas que en su momento
usamos -por ejemplo- para intercambiar por piedras de El Cholar y
construimos con ese material la biblioteca”, recordó.
“Con la venta de lo que extraigamos del bosque no vamos a tener
superávit, pero vamos a achicar la brecha entre lo que invertimos
y lo que recuperamos de allí”.
La cuestión legal
Un convenio de 1968 establecía –según Sepúlveda-
que la mitad de los bosques era de provincia y el resto, del municipio.
“Una conversación que habíamos tenido con el ministro
de Producción (Marcelo) Fernández Dotzel fue aprobada
por el gobernador Jorge Sobisch, quien tomó la determinación
de hacer el traspaso del 50% de los bosques que pertenecen a la provincia
para que todo lo que se saque de allí sea bajo control del
municipio”.
“Hoy –aclaró a continuación- la provincia
sigue aportando el dinero para el Plan Forestal y los sueldos de la
gente.
La transferencia es por dos años y tiene que ver con una planificación”.
Como ejemplo de esto citó el trabajo que se ha hecho para lograr
la declaración de Bosque Modelo.
Una de las últimas acciones realizadas fue la capacitación
de veinte personas en la cosecha y la conservación de los hongos
que crecen en los bosques.
Dudas y aclaraciones
La transferencia generó todo tipo de especulaciones
en el plano local. Para evacuar todas las dudas y exponer las razones
de esta determinación gubernamental se realizó una reunión
entre los empleados y la jefa del vivero provincial, un representante
provincial del área de Producción y autoridades del
municipio.
“Quedó claro que esto es sólo por dos años
y que ellos seguirán siendo empleados provinciales y dedicándose
a lo que se venían dedicando”, indicó el intendente.
El próximo desafío
De aquí en más, Sepúlveda vislumbró
un desafío: “Tomar conciencia de que la comunidad de
Huinganco es la propietaria del 100% de los bosques y ésto
-dijo- obedece a una necesidad que había surgido en las reuniones
intersectoriales para avanzar en el uso multifuncional del bosque”.
“A partir de ahora, con la planificación y el compromiso
de toda la comunidad, estoy convencido de que vamos a buscar alternativas
para el desarrollo social y económico”, concluyó.
Prototipo de cabañas
Para el aniversario de Huinganco se firmó un convenio entre
el Centro de Investigación Andino Patagónico (Chile),
el ministerio de Producción y la Municipalidad. El objetivo
es construir una vivienda con la madera extraída de los alrededores
de la localidad.
“La idea es hacer los planos y sacar una estimación de
los costos para saber si la madera es buena y se puede utilizar para
solucionar en parte el déficit habitacional”, explicó
el intendente Luis Sepúlveda. Subyace a este proyecto la implementación
de un programa de “esfuerzo compartido” que consistiría
en sumar voluntades: “La Municipalidad pondría los materiales
(varas extraídas del bosque) y el beneficiario, la mano de
obra propia o contratada a través de un crédito de la
Agencia de Desarrollo Urbano Sustentable”, anunció el
intendente.
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