Electricité de France decidió
desprenderse de la compañía por los problemas en la renegociación
de contratos. Neuquén > Marcelo
Mindlin y el fondo de inversión Dolphin que maneja parecen
estar llamados a ser actores fundamentales del sector energético
en los próximos años. Hace unos meses concretó
la compra de Transener, la principal transportadora energética
del país, por 14 millones de dólares y ayer Electricité
de France anunció en París que cedió por 100
millones de dólares el 65% del capital al fondo argentino.
EDF precisó en un comunicado que conservará el 25 por
ciento restante de Edenor, y que se ocupará de la misión
de asistencia técnica a la eléctrica argentina durante
los próximos cinco años.
La conclusión definitiva del acuerdo con Dolphin está
sujeta al visto bueno de las autoridades argentinas y francesas competentes.
Importancia
En un comunicado de prensa, el propio Grupo Dolphin explicó
la importancia de esta compra: «Al adquirirle a Electricité
de France el 65 por ciento de las acciones de Edenor, pasa a manos
de empresarios argentinos el control de la mayor distribuidora eléctrica
del país».
En efecto, la compañía es el primer distribuidor eléctrico
del país con 2,4 millones de clientes en la provincia de Buenos
Aires y una facturación en 2004 de 305 millones de euros.
Edenor tuvo en el primer trimestre de 2005 un beneficio neto de 9,7
millones de pesos (menos de 3 millones de euros), un 50 por ciento
menos que en igual período de 2004.
Mindlin
Al conocerse la información, el titular de Dolphin
y amigo personal del ministro Julio De Vido, Marcelo Mindlin dijo
que «es un gran orgullo que una empresa de la magnitud de EDF
haya elegido al Grupo Dolphin como su socio local, y que haya depositado
en su equipo de profesionales la confianza para que se haga cargo
del Management de Edenor y encare la resolución de la reestructuración
de su deuda y la renegociación de su Contrato de Concesión».
En ese sentido, Mindlin agregó: «Estamos convencidos
que si somos exitosos en sortear estos desafíos, habremos recuperado,
no sólo valor para sus accionistas, sino también una
empresa sana y viable para el desarrollo del país».
Decisión
Hasta ahora el gigante francés controla el 90 por ciento de
Edenor -en cuyo capital había entrado en 1992-, mientras que
el personal de esta filial tiene el 10 por ciento restante.
La decisión de vender su filial argentina está relacionada
con los malos resultados que ha tenido en el pasado y con el contencioso
con el gobierno argentino por su demanda -no aceptada hasta ahora-
para el aumento de las tarifas de Edenor, que están congeladas
desde 2002. |