Luego de la muerte por un caso de
botulismo,
también expresó la necesidad de prevenirlo.
Neuquén > El Ministerio de Salud
de Neuquén alertó a la población sobre el contagio
de la enfermedad conocida como tos convulsa o coqueluche y la prevención
del botulismo.
En el marco de un alerta nacional y ante el aumento de casos “sospechosos”
de tos convulsa en diversas localidades de la Provincia de Neuquén
durante este año, se recomendó mantener la cobertura
completa de vacunación cuádruple.
Hasta el momento, durante el año 2005 se registraron en toda
la provincia neuquina 16 casos de tos convulsa, mientras que durante
el año 2004 se contabilizaron 97 casos, de los cuales 3 sucedieron
en Neuquén Capital.
Frente a esta situación, la única forma de prevención
es cumplir estrictamente con el esquema de vacunación cuádruple
(que es gratuito), las cuales se dan la 1º dosis a los 2 meses,
la 2º dosis a los 4 meses, la 3º dosis a los 6 meses, el
1º refuerzo a los 18 meses y el 2º refuerzo al ingreso escolar.
Irene Wietig, referente en la provincia del Programa de Inmunizaciones,
explicó que la vacunación es la única manera
de prevenir esta enfermedad, aunque también la lactancia materna
ayuda a su prevención; “la primera vacuna es la leche
de la madre, y es muy importante que la madre sea conciente de esto
y lo incorpore”, explicó.
Por su parte, Wietig comentó que existe un contagio de adultos
y adolescentes a los chiquitos; “la provincia fue acumulando
susceptibles, con la vacuna logramos un 85% de humanidad pero hay
un 15% que por alguna razón no están inmunizados por
más que se los vacunen y a esto se le suma un porcentaje de
gente que no se vacuna. Esto, se va acumulando a lo largo de los años,
aumenta el grupo de gente que contagia”, por lo que recomendó
que sean vacunados todos los niños como corresponde, y resaltó
que es gratuito.
Botulismo
La muerte de un hombre a causa del botulismo en la ciudad de Rincón
de los Sauces puso sobre el tapete otro de los temas que preocupa
a la salud y que también aumenta en estas épocas del
año.
Esta enfermedad infecciosa es provocada por “clostridium botulinum”,
una bacteria productora de formas de resistencias llamadas esporas;
“si el medio le es propicio, sin oxígeno y escasa acidez,
germina, se multiplica y origina una neurotoxina, pero que no produce
ningún cambio evidente en el alimento”, explicó
Laila Andjelic, de Bromatología del Ministerio de Salud.
De esta manera, Andjelic resaltó que el Código Alimentario
permite únicamente las conservas de realización industrial,
pero también observó que como las conservas artesanales
son una realidad, recomendó para evitar el botulismo, que todos
los alimentos que se vayan a consumir y que provengan de este tipo
de conservas, deben ser sí o sí sometidos al calentamiento
a temperaturas superiores a los 80ºC durante 10 minutos, ya que
así se destruye la toxina.
Por su parte, la licenciada explicó que la enfermedad, “se
caracteriza por presentar faringitis, sequedad extrema en la boca,
síntomas gastrointestinales y neurológicos que luego
puede progresar a parálisis total y muerte».
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