Una mujer de Pieda del Águila
no pudo, días atrás, ingresar a España. Intervino
la Cancillería y hoy podrá asistir al casamiento de su
hija. Buenos Aires > En el día
de ayer, arribó a España Damaris Vivian Avalo, la mujer
oriunda de Piedra del Águila, quien fue rechazada días
atrás por las autoridades migratorias de ese país por
presunto incumplimiento de los requisitos exigidos.
A partir de esa decisión, la mujer, que viajó a España
para asistir al casamiento de su hija, fue reembarcada de regreso
a la Argentina. Tal como informó la Cancillería Argentina,
a raíz de las gestiones realizadas por el organismo diplomático,
la mujer neuquina pudo concretar ayer su ingreso al país europeo
para encontrarse, durante la jornada de hoy, con su hija, quien contraerá
matrimonio por civil y el próximo 6 de junio por iglesia.
Cancillería informó que Avalo fue recientemente rechazada
en frontera en el Aeropuerto del Prat de Barcelona, en razón
de que las autoridades migratorias peninsulares entendieron que no
cumplimentaba los requisitos de ingreso exigidos, por lo que fue reembarcada
de regreso a la Argentina. Desde la Cancillería se consideró
que el caso de la señora Avalo era una causa humanitaria, ya
que lo sucedido la privaba de estar presente en la boda de su única
hija. El organismo argentino asumió la responsabilidad de hacer
todo lo que estuviera a su alcance para que el reencuentro familiar
tuviera lugar.
Primera vez
Para Avalo era la primera vez que viajaba fuera del país
y lo hacía invitada para asistir a la boda de su única
hija con un ciudadano español, residentes ambos en Barcelona,
quienes le costearon el pasaje. En dicha oportunidad, fueron rechazados
y reembarcados hacia la Argentina otros cuatro ciudadanos por el mismo
motivo, no obstante haber recibido todos asistencia de los Consulados
argentinos en Barcelona y en Madrid, que nada pudieron hacer para
revertir la situación ante la intransigencia de las autoridades
españolas.
Los ciudadanos rechazados denunciaron expresamente ante la Cancillería
Argentina, haber sido objeto de malos tratos por parte de la Policía
Nacional española, la cual ejerce el control migratorio. El
caso de la Damaris Avalo revestía especial significación,
ya que se le exigió la presentación formal de una carta
de invitación de sus familiares en España, no obstante
que estos estaban presentes en el Aeropuerto y manifestaron responsabilizarse
por su ingreso. Pese a ello, discrecionalmente fue dispuesto su reembarque
hacia la Argentina. |