Los dos últimos triunfos de
la Selección encendieron otra vez el entusiasmo, aunque la hincha
pide más.
Buenos Aires > El
seleccionado argentino de fútbol está a un paso de clasificarse
para el mundial de Alemania 2006, un hecho que siempre se dio por
descontado, pero que recién se pudo confirmar después
de la histórica victoria en Bolivia y el ajustado triunfo ante
Colombia.
Si después del triunfo en La Paz el técnico José
Pekerman estaba conforme, con la victoria del miércoles su
felicidad, más allá de que Argentina no jugó
bien ante Colombia, parecía ser total.
El tema es que el técnico del seleccionado argentino diagramó
un esquema de trabajo no habitual, convocando 33 jugadores y formando
dos equipos diferentes. Por eso fue observado con recelo por todo
el medio futbolístico.
Solito y solo
Y los resultados le dieron la razón: porque después
de estas dos fechas de la eliminatoria sudamericana Argentina quedó
a un paso del mundial, lidera cómodamente la tabla de posiciones
con 28 unidades, se ganó tras 32 años en la altura de
La Paz y el público sigue su romance con el nuevo «equipo
de José».
«Pekerman ya tiene que pensar en el mundial», se escucha
decir. Y seguro que el entrenador del equipo argentino, por más
que no lo diga, lo está haciendo.
Pero para el mundial falta más de un año y Pekerman
aprovecharálos partidos que quedan de la eliminatoria para
terminar de formar el grupo que lo seguirá hasta Alemania.
No hay dudas que de estas dos jornadas lo más importante, además
de las victorias, fue la actuación en los 3.600 metros de altura
de La Paz.
Porque el seleccionado argentino en Bolivia ganó con autoridad,
mostrando la clase de Esteban Cambiasso y todo el peso ofensivo de
Luciano Galletti, para vencer a dos rivales: el equipo de Ovidio Messa
y la temible altura de La Paz.
El punto flojo de estos dos partidos estuvo en el de ayer ante Colombia,
porque no se jugó bien aunque se ganó clara y merecidamente.
Justamente la base de futbolistas que participó del partido
ante Colombia es la que tiene Pekerman en mente para jugar en Alemania.
Por eso algunos quedaron preocupados después de la labor ante
los colombianos, ya que este equipo no mostró buen fútbol
y por momentos no tuvo ideas ni ingenio para superar la férrea
defensa del seleccionado que dirige Reynaldo Rueda.
Llamado de atención
Claro que la actuación de ayer tiene sus atenuantes, porque
Argentina se encontró con un rival que se cerró bien
atrás, nunca se desordenó y jamás dio espacios
porque no le interesó atacar, incluso cuando iba perdiendo.
Por lo tanto, al no pesar en el juego Juan Román Riquelme ni
Luis González, Argentina dependió sólo del buen
trabajo de Cambiasso para abrir a la cerrada defensa colombiana.
Es cierto que Argentina no tuvo brillo, que no logró jugar
bien, pero si teniendo una mala noche le genera siete u ocho situaciones
de gol a un equipo que presenta un formación con diez hombres
dispuestos sólo a defender, no es para nada despreciable.
Claro, a un seleccionado argentino, por la categoría de futbolistas
que dispone, siempre se le pide más, aunque en estos tiempos
sólo se solicitan resultados, más allá que ahora
los seguidores del «Bilardismo auténtico» critican
al equipo de Pekerman por no jugar bien. |