El municipio respondió al pedido
de informes requerido por un fiscal. Se anticipó la medida por
el boletín municipal. Neuquén >
Los funcionarios municipales, José Lampa y Carlos Rivera, director
de Cementerio y de Espacios Públicos, respondieron el oficio
enviado por el fiscal Richard Trinchera. En el escrito se informa
ampliamente sobre el traslado de restos óseos desde el Cementerio
Central hasta la necrópolis El Progreso.
Señalan que en la última semana de enero, se realizaron
actividades relacionadas con la ejecución de una obra de ampliación
de 110 nichos en el Cementerio Central.
Los trabajos fueron adjudicados a la empresa Braspin S.A, quien solicitó
“remover el osario general” en razón de que parte
de la obra “debía fundarse sobre el mismo”.
Rotura
Luego de la intervención de la Subsecretaria de Obras Públicas
y otros funcionarios del área, el director de Cementerio informa
que por estrictas razones técnicas de funcionamiento del horno
crematario, “era absolutamente imposible la reducción
por cremación de los elementos contenidos en el osario”.
Agrega que “para acceder a los mismos se produjo la rotura de
la losa superior del osario, mezclándose algunos despojos con
pedazos de hormigón, por lo que sugiere trasladar los restos
a un osario complementario en el Cementerio Parque.
Finalmente el Subsecretario de Servicios Públicos, Carlos Cides,
autorizó el traslado, procedimiento que fue debidamente supervisado
por personal de la Subsecretaría de Gestión Ambiental.
En el escrito, dirigido al Fiscal General, se sostiene que el contenido
del osario común se compone de “restos óseos no
reclamados”. Además se puntualiza que por Ordenanzas
1362 y 9578 los restos humanos fueron exhumados, reducidos y depositados
en el osario, luego de que se vencieran los plazos de arrendamiento.
Los directores del municipio señalan además que el procedimiento
fue publicado el día viernes pasado en el Boletín de
Prensa y que el informe fue titulado “Traslado de osario por
obras en el Cementerio Central”.
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