Tensión tras el asesinato del ex premier libanés

EE.UU. retiró embajador en Siria

 
 
Cientos de libaneses salieron a las calles a llorar la muerte de Hariri,
considerado el padre de la reconstrucción libanesa.
La muerte de Hariri no sólo provocó movimientos políticos. Parte de la indignación se desahogo en las calles de Beirut donde una turba atacó intereses sirios.


Disminuir tamañoAumentar tamañoCambiar tamaño  Imprimir Imprimir
 
       
   
   
  Siria volvió a negar su implicación en el atentado. Israel y EE.UU. redoblaron sus acusaciones.

Beirut (Télam-SNI) > EE.UU. retiró a su embajador de Siria por el atentado que mató ayer al ex premier libanés Rafik Hariri, mientras que una turba atacó intereses sirios en Beirut por considerar a Damasco culpable del ataque, que amenaza reavivar la guerra civil libanesa (1975-1990).
La muerte de Harari llega en un momento crítico del volátil Medio Oriente, justo cuando israelíes y palestinos buscan cimentar una tregua tras cuatro años de violencia y EE.UU. intenta pacificar a Irak, advierte a Siria por su rol en la región y amenaza con atacar a Irán por sus actividades atómicas.
Siria, que ejerce gran influencia política sobre Líbano y posee a 15.000 soldados en su pequeño territorio, volvió a negar ayer su implicación en el asesinato, pero la oposición libanesa, Israel y EE.UU. redoblaron sus acusaciones a Damasco y el gobierno libanés del presidente Emile Lahoud, aliado de Siria.

Reacción
En una reacción que ilustra el grado de tensión, el presidente estadounidense, George W. Bush, llamó a consultas a su embajadora en Damasco, Margaret Scobey, en señal de la «profunda indignación» de Washington por la muerte de Hariri, según informó el Departamento de Estado.
En una sesión de urgencia, el Consejo de Seguridad de la ONU condenó el «atentado terrorista» que mató a Hariri y lo calificó de «intento de desestabilización del Líbano», pero no acusó ni sancionó a Siria, como quería EE.UU., que antes de la votación trató de negociar «medidas punitivas» contra Damasco.
Tras renunciar a su cargo en octubre pasado enfrentado con Damasco, Hariri, de 60 años, comenzó a acercarse a la oposición -que reclama la retirada de las fuerzas sirias-, y no se excluía que se postulara y lograra una aplastante victoria en las elecciones legislativas previstas para abril o mayo próximo. Electo cinco veces jefe de gobierno -fue premier 10 de los últimos 14 años-, dueño de gran fortuna y considerado el padre de la reconstrucción libanesa, Hariri murió el lunes en Beirut junto a otras 14 personas al estallar un coche bomba «casi seguramente» conducido por un atacante suicida, según indicó la policía.
Parte de la indignación contra Siria se desahogó en las calles, en las primeras reacciones populares violentas al atentado, que se teme pueda retrotraer el país a su devastadora guerra civil, que dejó más de 100.000 muertos. En Saida, el pueblo natal de Hariri, manifestantes atacaron a trabajadores sirios e hirieron a cinco antes de que interviniera la policía. En Bairut, una turba atacó con piedras la sede en Beirut de la sección libanesa del partido Baas, que gobierna en Siria.

 

 


La Mañana Neuquen
Redacción Cómo anunciar  |  Webmaster
Neuquen - Fotheringham 445 - Teléfono 449 0400
Copyright © 2002-2004 - La Mañana Neuquen - Todos los derechos reservados
 
 
 



Min.: 18°c
Máx.:
29°c
Cielo parcialmente nublado. Vientos leves del noroeste, rotando al noreste.
 
Visite La Mañana Cipolletti

 Transportes Interurbanos
 Guía Profesional
 Teléfonos de urgencia
 Farmacias de turno
 Transporte Aéreo
 Quiniela
 Horóscopo
 
 
 
 
 

Cine
Teatro
Recitales
Televisión
Videos

 
 

Revista Caras